miércoles, 26 de abril de 2023

                           Confederación Imperial Galáctica


Libro - 19

Diplomacia


1











Fecha estelar - 5345

4º Cuadrante Militar del Imperio

Sistema Strela

En ruta hacia Strela III

Nave de Guerra "Represor"

 

 

Cosa rara, en la sala de reuniones del Represor se encontraban la Princesa Kilara, la Almirante Tanya, Selena y el General Mao tratando de saber que era lo que estaba haciendo exactamente su Alteza Imperial el Príncipe Jhored. Se habían dado una serie de circunstancias que les había puesto de inmediato a los cuatro en guardia, incluso los Gemelos se habían dado cuenta de que su Padre nuevamente estaba tramando alguna de las suyas. Ya inicialmente desconfiaron de sus intenciones cuando el Príncipe Jhored tras ordenar regresar a Capital desde las cercanías de la Frontera Shilrrurs, muy alegre les dijo a los gemelos que se preparasen porque tal y como les prometió, los iba a llevar a visitar una de las Reservas Imperiales de la Naturaleza, concretamente la situada en el planeta Strela III.


La situación en las Colmenas aún era considerada por los servicios de inteligencia como "volátil", los Shilrrurs seguían muy nerviosos, manteniendo fuertes cantidades de efectivos entre las Fronteras de las Colmenas y la Confederación Imperial. La Liga de Mundos Libres, aun manteniendo su Flota en una segunda línea sobre la Frontera Karasasn, esta seguía inestable, y para terminar de arreglar la situación, la Mancomunidad de Vega tenía otra vez serios problemas en los territorios Razors y Corix ocupados, donde se habían producido varias sublevaciones, y cuyo embajador parecía tener mucha prisa por reunirse con su Alteza. Para terminar de rematarlo, en el Sector de Chin habían reaparecido naves de la Heredad, y no parecían ser precisamente antiguas o naves civiles reconvertidas para uso militar. Dado que, con todo este panorama, repentinamente su Alteza Imperial, había decidido desentenderse de todo ello para llevar a sus hijos a una visita lúdica, no había nadie a su alrededor que se fiase de sus intenciones.

Los Gemelos llevaban mucho tiempo tras su padre para que los acompañase a visitar uno de estos espacios desde que fueron abiertos al público tres años antes. El Príncipe Jhored se lo prometió si en ese año sacaban unos resultados excelentes en sus estudios y se portaban bien, cosa que ambos niños hicieron, travesura arriba, travesura abajo. Incluso los gemelos con lo pequeños que eran, se quedaron muy extrañados de que su padre "pasase de todo" para llevárselos de "visita". Tanto ellos, como su madre y los colaboradores más cercanos de su Alteza, incluso el propio Emperador, se quedaron, como se suele decir, con la mosca tras la oreja, porque no era ni medianamente normal. Lo malo, es que una vez investigado todo lo relativo a ese lugar al que quería llevar a los niños, no encontraron nada anómalo, de hecho, de todos los Parques que se abrieron en la Confederación Imperial, este era el más seguro y mejor considerado, ya que no había tenido ningún problema o denuncia de algún tipo más allá de algún comentario negativo del tipo "me esperaba más", "pensé que sería más emocionante", y cosas así.

El Servicio de la Reserva de Parques Imperiales había sido en su momento una idea de su Alteza que fue enormemente criticada y que, en esos momentos, tres años después de sus aperturas al público estaban demostrando ser una importante fuente de ingresos para los planetas donde estaban establecidos. El éxito había sido tan enorme que había innumerables peticiones para que fuesen ampliados, pero las condiciones para ello que en su momento estableció su Alteza eran Draconianas. Tal y como los trataba Jhored, si hubiese existido algún tipo de problema importante o de complicada resolución en ese Parque seria entendible el que quisiese ir, pero aquello era casi como un paraíso de funcionamiento… Por lo menos, hasta el mismo instante en que la Flota del Represor entró en el sistema recibiendo aquella comunicación de la estación de Recepción del Parque que de inmediato activo de nuevo todas las alarmas de la Almirante Tanya tras hablar brevemente con su Alteza y recibir sus órdenes…

-        ¿Pero qué es lo que ha ocurrido? -pregunto la Princesa Kilara-.

-        Pues que según nos ha informado control de aproximación, resulta nos han cancelado uno de los amarres a la estación del planeta- replico Tanya-.

-        ¿Alguna avería en la estación? -preguntó el General Mao-.

-        Ninguna, el sistema nos ha informado que la dársena se le ha trasferido a una nave privada, una muy lujosa nave privada de hecho -recalco la Almirante-.

-        Deduzco que el problema entonces es Jhored, que se habrá enfadado por ello… tratare de calmarle y que no haga nada "extremo" -indico Kilara-.

-        No Princesa, al contrario, su Alteza al ser informado, riéndose, simplemente nos "indico" que lo dejásemos correr y no nos preocupásemos… -replico sarcástica la Almirante-.

-        ¿Qué mi marido dijo que "lo dejaran correr" y riéndose?... Eso es imposible, estas Reservas son poco menos que su ojito derecho, ¡pero si no las ha perdido de vista desde que las creo…! Esas dársenas son exclusivamente para los "visitantes" de la reserva, nadie, y recalco, ¡nadie!, tiene potestad para "cederlas", mucho menos aún, dejando visitantes sin amarre… ¿Qué Jhored no ha reaccionado ordenando de inmediato matar al responsable de ello?... ¡Imposible! -dijo Kilara-.

-        ¿Qué está pasando aquí?... General Mao… ¿encontró algo raro cuando verifico esta reserva? -preguntó Selena-.

-        Nada, de hecho, es la que mejor funcionamiento muestra. Es cierto que ha generado algún comentario negativo por diversos motivos, pero todos han sido nimiedades, no ha tenido ninguna queja desde que se inauguró -replico el General-.

-        Un momento General… eso no es así… puede que no sea más que un caso, pero sí que existe una queja en firme… Jessy y Kelme, no sé si se acordaran de ellos, pero mi amiga Telma me dijo que estuvieron aquí de visita y salieron tan disgustados con lo que se encontraron, por cómo les trataron, que incluso elevaron una queja oficial a la Dirección General de Parques… -replico Kilara sorprendida-.

-        Se a quienes se refiere, pero en el sistema no aparece ninguna queja "oficial" de nadie… absolutamente nada, únicamente reseñas… -replico el General Mao, quien miro junto a los demás a la Almirante que en esos instantes recibía una comunicación del puente del Represor-.

-        Bueno… pues está claro que en ese sitio pasa algo… su Alteza acaba de ordenar a las tres naves Q que nos acompañaban para hacerse pasar por yates de recreo, que regresen a sus bases. Además, ha transferido sus identidades al Represor, al Sol Negro y al Crucero de Batalla "Vengador", los cuales obviamente, no parecen para nada naves “civiles”. Según parece, quienes vamos a ocupar las dos dársenas restantes seremos nosotros y el Vengador… el Sol Negro orbitara en una posición externa a nuestros anclajes con uno de sus escuadrones de Cazas Escorpión desplegado para impedir que nadie se aproxime a nuestros "amarres"…

-        Pues creo que debemos de presuponer, que su Alteza estaba enterado de la queja presentada por los Sres. Kelme Strassger y Jessy de Voerse… supongo que su amiga Telma o su marido, el señor Doken le debieron de comentar algo… y no le ha debido de gustar en lo más mínimo… -repuso Selena-.

-        Si presentaron una queja, y el general le aseguro a Jhored que no existía ninguna, es que algún imbécil ha falsificado informes…  Creo que alguien ya está en serios problemas aun antes de que lleguemos… Conociendo a Jhored, el problema va a ser de esos de los de perder la unión de la cabeza con el cuello… -replico Kilara mientras volvían a mirar a la Almirante, quien nuevamente recibía una comunicación del puente-.

-        Mas de lo que se pueda creer Princesa… según parece su Alteza había ordenado a la "Estigia" junto a la Fragata Blindada de Asalto A-05-TF con Sigrid y sus Comandos a bordo que se reúnan con nosotros en Strela III… Ambas naves acaban de entrar en el sistema…-dijo la Almirante-.

-        No me gustaría estar en la piel de quien sea el responsable de lo que esté ocurriendo con esa reserva… -replico Kilara-.

-        Ni a nosotros Princesa, ni a nosotros. Pero bueno, creo que ya está claro, aquí existe un problema y nuevamente lo ha organizado todo delante de nuestras narices… Ha actuado por su cuenta sin decirle nada a nadie… -dijo Selena-.

-        La presencia de la corbeta "Estigia" implica que alguien va a hacer un viaje con todos los gastos pagados a una de las prisiones del SISI de Hibernia o Inferno… -replico Tanya-.

-        Mas vale que todos volvamos a nuestras obligaciones y revisemos de nuevo todo lo que sabemos sobre este lugar si queremos evitarnos más sorpresas… -replico el General Mao-.

-        Si, será lo mejor… por cierto Selena… refuerza toda la seguridad de mis hijos una vez desembarquemos… lo que sea necesario… Si pone alguna pega, me lo dices que yo me encargo de meterle en razón… -dijo muy seria Kilara-.

-        No se preocupe señora… los Gemelos estarán a salvo en todo momento… moleste a quien moleste… Además, me parece que Sigrid y sus comandos aparte de otras posibles misiones, también están aquí en parte por ese mismo motivo… -replico Selena-.

-        No lo sé, porque si bien la "Estigia" si se dirige a reunirse con nosotros, la Fragata de Sigrid va a toda velocidad en dirección a Strela III y por lo que me indica el sistema, ya ha entrado en alerta de combate… -replicó la Almirante Tanya-.

-        Eso quiere decir que van a desembarcar las tropas… -replicó pensativa Selena-.

-        No lo creo, porque sus anillos de asalto están desplegándose a la posición para el lanzamiento directo… Me parece que Sigrid y sus comandos van a ir directamente al Planeta por la vía rápida… -informo la Almirante-.

Lo que ninguno sabia es que el Príncipe Jhored había monitorizado toda la reunión con una leve sonrisita en sus labios. Efectivamente, fue un comentario de pasada de Doker quien le puso sobre la pista del problema existente en la Reserva de Strela III, por ello envió algunos agentes del SISI a investigar con órdenes de no intervenir e informarle directamente de lo que descubriesen… Una vez recibió toda la información, fue cuando comenzó a prepararlo todo y ordenar el despliegue rápido de ciertos elementos de la Flota y el Ejercito, incluyendo los Comandos de Sigrid. Además, todo esto también le servía para otros propósitos, alguno incluso más "oscuro" de lo normal… Uno de esos que no le convenia que sus colaboradores más cercanos, Kilara o su propio tío se enterasen hasta que fuese demasiado tarde y se enfrentasen a los hechos consumados.

Para cuando finalmente tuviesen que bajar al planeta para sus "vacaciones", la A-05-TF ya estaría en posición y además de otras operaciones que tenía previstas, que servirían para perfeccionar parte de su entrenamiento, especialmente el de Lanzamiento directo sobre la superficie Planetaria, también serian Sigrid con sus comandos quienes se encargarían de la seguridad de todo el grupo … De hecho, Jhored sonrió al pensar en los problemas que sus órdenes le causo a la coronel Sigrid en cuanto sus "muchachos" se enteraron de las "diferentes" misiones, porque todos querían la misma, saltar sobre el Planeta en ciertos puntos muy específicos.

A Selena la situación no le terminaba de convencer en absoluto, tenía la sensación de que todo esto no era tan simple como parecía, habían descubierto la "sorpresa" de su Alteza con lo que para ella era una excesiva facilidad, no se había molestado en lo más mínimo en disimular, y con él, las cosas nunca eran tan "sencillas". Para entendernos, a Selena su instinto, y porque no, también su conocimiento sobre Jhored, le indicaba algo parecido a que su Alteza les estaba mostrando lo que hacía con su mano derecha para que no se fijasen en la izquierda… Además, sabia de primera mano que en esos momentos en Mar-Shagan, “oficialmente”, se encontraba el Profesor Jharkon supervisando personalmente la mejora de las fuentes energéticas de ambas UNEX, a las que, si las pruebas finales eran positivas, oficialmente seguiría de inmediato una actualización para las tres de la UEP Estrella Oscura. Ese “oficialmente” se debía principalmente a que Selena ya había averiguado que, en realidad, los trabajos se estaban realizando de forma simultánea en las tres naves. Conociendo que a Jhored los juegos con la Estrella Oscura le hacían muy poquita gracia, el que sus trabajos se adelantaran a la finalización de los de las UNEX y sus pruebas finales, era cuanto menos extraño, muy extraño.

Si no fuese porque en Mar-Shagan, cosa que había verificado al instante, aún estaban el Almirante Stratos, el Almirante Tagard, la General Samantha y el Represor lo tenía bajo sus pies, con la repentina presencia de Sigrid en el sistema Strela pensaría de inmediato que su Alteza nuevamente estaba preparando otra como la del "nuevo" sistema para los agujeros de gusano que implemento en su nave insignia. Selena "sentía" que todo estaba siendo extremadamente "claro" con su Alteza, y cuando preparaba alguna de las suyas, porque estaba segura de que algo tramaba, nunca había sido así anteriormente… Era raro que alguno de ellos descubriese algo hasta que no resultaba demasiado tarde…

La siguiente sorpresa se la llevaron cuando su Alteza Imperial, el Príncipe Jhored, decidió "repentinamente" que quería desembarcar en la estación por la cubierta número ocho y no admitió replica de sus implicaciones. Esto podría parecer un capricho, pero desde el mismo instante en que para hacer eso el Represor debería de entrar en su amarre con una inclinación de -8.43º y compensar el sistema de gravedad artificial de la propia estación para que sus tripulantes "no se fuesen de lado", implicaba que la orden no era gratuita, existía alguna razón. La Almirante Tanya tardo apenas unos minutos en darse cuenta del motivo, ya que, con esa inclinación, una parte muy determinada de los costados del Represor quedaban protegidos, uno por la superestructura de la Estación, y el otro por el Crucero de Batalla Vengador. Con eso el nombre de la nave sería imposible de identificar salvo que alguien entrara en la dársena desde el exterior, donde estaría desplegada uno de los escuadrones de Cazas Escorpión del Sol Negro impidiendo el acceso. Estaba claro para todos que su Alteza llevaba un plan en mente, y que estaba desarrollándolo tranquilamente ante sus narices sin informar a nadie, pero especialmente, sin ocultarlo… lo que les cabreaba sobre manera.

Cuando desembarcaron en la estación, la comitiva la componían su Alteza, la Princesa Kilara, los Gemenos, Selena, el General Mao, una docena de agentes del SISI. Para sorpresa de todos, en la puerta del acceso al Represor, alimentados por una línea de energía desde la nave, se instalaron dos robots MKII con armas energéticas rotativas de alta velocidad en sus brazos y los escudos de defensa desplegados… Desde la puerta de acceso destinada a la nave se accedía directamente a un espacio de espera para los visitantes, donde se suponía que serían recogidos para comenzar su visita a la reserva. La persona a cargo del lugar, una especie de Azafata sentada detrás de una consola, estaba visiblemente nerviosa mirando a los grandes ventanales, en los que se podía apreciar perfectamente, que lo que el sistema identificaba como dos naves de pasajeros privadas, en realidad eran dos poderosas naves de Guerra de la Flota. Aunque en ninguna de ambas se podían apreciar sus nombres o insignias identificativas, los mas que visibles cañones de gran tamaño que ambas portaban resultaban de lo más elocuentes.

Desde la estación, cuando ambas estaban a punto de atracar, el centro de control se puso en contacto con el Represor cancelándoles los amarres, algo a lo que ninguna de ambas naves hizo el menor caso. Aclaro que el Centro de Mando se comunicó oralmente con el Represor y el Vengador, porque el sistema por su parte seguía autorizándoles pese a todos los intentos de bloqueo. Mientras ambas entraban en la dársena comenzando el amarre, excepto dos de los cruceros Pesados que se dirigieron a toda velocidad hacia el Séptimo planeta, justo al otro extremo del sistema, el resto de la Flotilla con el Superacorazado Sol Negro a la cabeza, se desplego del modo más visible para cubrir la zona en donde ambas naves habían accedido a la estación.

Uno de los problemas con el que se encontró repentinamente el Centro de Control de la Estación, es que perdieron por completo el dominio sobre el sistema de Defensa de la misma, además de que por algún "extraño" motivo, el propio ordenador central se negaba en redondo a iniciar cualquier proceso que implicase algo relativo a esas dos naves. De hecho, cuando se trató de cancelar su amarre en el sistema, este virtualmente bloqueo todo tipo de accesos al mismo por parte del Control de la estación obligándoles a comunicarse directamente con ambas naves, que como dije, no hicieron ni caso. Incluso cuando desde el Control Central intentaron activar la alerta máxima en la Estación, el sistema se lo denegó, cancelando multitud de mandos y accesos, entre ellos el de las Armas o los propios escudos. La realidad es que en cuanto la flota se acercó a la estación, por orden directa de su Alteza al sistema, básicamente el control de la misma paso al puente de mando del Represor.

A los pocos minutos de desembarcar su Alteza junto con sus acompañantes, tras perder el tiempo un ratito del modo más visible, seguido por Selena y dos de los agentes de escolta, se acercó a la Azafata, la cual con visible nerviosismo segua mirando de reojo los ventanales desde donde se tenía una más que magnifica vista de los gigantescos cañones del Represor. Cuando vio acercarse al cuarteto, su gesto paso a ser de una sonriente amabilidad que no engaño a nadie. Jhored sabía que posiblemente un poco antes de su desembarco desde el control de la Estación debían de haberle indicado que ese amarre no estaba autorizado. La joven tenía un terminal justo delante, y por el modo frenético en que lo manejaba, debía de estar dándose contra un muro ya que el sistema sin duda estaba autorizando "la visita", contradiciendo las instrucciones que más que posiblemente hubiese recibido del Control o que ella misma estuviese tratando de verificar o modificar.

Selena estaba preocupada por la actitud del Príncipe Jhored al desembarcar. Raro en él, que, en lugar de dirigirse directamente hacia la Azafata, quien era más que visible en su nerviosismo, estuvo "perdiendo tiempo" con los Gemelos, levantándoles en brazos para acercarse a los ventanales desde donde se veía la mole que era el Represor. Solo dejo a los gemelos con su madre y se puso en movimiento, cuando su comunicador personal, emitió un pitido en un tono un tanto particular, lo que parecía indicar que fuese lo que fuese que estaba esperando ya se había producido… Selena, en cuanto llegaron a la Azafata y vio la situación hizo un gesto a sus compañeros para que se acercasen con el resto hasta ellos, no quería a nadie del grupo separado de su Alteza, no pensaba facilitarle lo que fuese que tenía en mente… Selena sabía que con Kilara y los Gemelos cerca se comediría en lo que fuese que hubiese planeado, además estos últimos tenían tendencia a preguntar a su padre por casi todo, y más importante aún, su Alteza también acostumbraba a contestarles… Era un modo nada sutil por su parte de tratar de enterarse de que demontres estaba ocurriendo.

Apenas llegaron hasta la azafata y Jhored la saludo cuando la situación comenzó a complicarse visiblemente a ojos de Selena quien un segundo antes, había hecho el gesto de que todos se acercasen. Por un lado, se acercaba un grupo de agentes de protección de la estación, lo que implicaba presencia de armas algo que evidentemente no le gustaba cerca de sus protegidos. Por otro, también se acercaba con gesto serio una persona ante cuya visión tanto la Azafata como el que parecía dirigir al grupo de agentes torcieron el gesto, y para terminar de rematarlo desde un acceso para personal, una joven sonriente con lo que parecía un uniforme de Mantenimiento de la estación, y todos ellos parecían ir a confluir sobre el grupo de Selena, especialmente como ya dije, en referencia al grupo con "armas". Por cierto, que según le pareció a Selena, ante todo esto su excelentísima Alteza Imperial el Príncipe Jhored pareció relamerse como si estuviese a punto de comenzar a divertirse… lo que solía implicar algo nada bueno para alguien.

La primera en hablar fue la Azafata, pero no hacia su Alteza como esperaba Selena, sino hacia el sujeto solitario que se acercaba…

-        Dragos, tienes que irte… no puedes estar aquí, ya lo sabes. Si se enteran en Parques te van a sancionar duramente… -dijo la Azafata-.

-        No te preocupes Lena… solo he venido para aclarar un malentendido…

-        Dragos… ¿Qué haces aquí? Debes irte de inmediato antes de que alguien se entere… -replico quien estaba al mando de las fuerzas de seguridad de la estación que se acercaban-.

-        Hola coronel Krilos, tranquilo… me iré enseguida, solo he venido para ver al Señor Jhored… ¿es alguno de ustedes? -pregunto hacia el grupo de su Alteza-.

-        Yo soy Jhored, supongo que usted es nuestro guía, el Sr. Dragos Leratonetds -replico sonriente Jhored-.

-        Soy Dragos, pero creo que ha habido un error, no puedo ser su guía, mis permisos para ello fueron suspendidos hace tres meses por la dirección de Parques de Strela III, pero si quiere le puedo recomendar a alguien…

-        Para nada Sr. Dragos, le quiero a usted. Aunque no entiendo, cuando le solicite como guía sus permisos estaban en activo… y fue hace apenas unos pocos días… -replicó sonriente Jhored-.

-        Eso es imposible… el Sr. Dragos fue suspendido… -replico la Azafata-.

-        Bueno, pues compruébelo usted misma… el Sr. Dragos está autorizado como guía y le quiero a él si no se opone… Por cierto, me dieron recuerdos para usted, unos amigos estuvieron de visita y me hablaron maravillas. No sé si los recordara, eran un matrimonio joven, Kelme Strassger y Jessy de Voerse -replico un más que sonriente Jhored, que cada vez ponía más nerviosa a Selena-.

-        Es verdad… Tus permisos han sido restaurados… según esto, se hizo desde la Dirección Central de Parques en el Planeta Capital… -replico la Azafata con cara de no creérselo-.

-        Eso es imposible… -dijo el Coronel Krilos-.

-        Pues lo es… mírelo usted mismo… -replicó la Azafata, haciendo que el Coronel se dirigiese de inmediato hasta su puesto-.

-        Bien, es cierto… Dragos, tus permisos han sido restituidos… pero no creo que duren mucho en cuanto el director de Parques se entere… aprovecha la situación para irte ahora… yo me encargo de impedir que te detengan… -replico el Coronel-.

-        Bueno, pero al menos, en este momento si puedo estar aquí sin problemas… -sonrió sarcástico Dragos-.

-        Si, eso sí… pero como te digo, aprovecha… -replico riéndose el Coronel Krilos-.

-        Lena… hermana… ¿sabes cuál es esa nave? -dijo de repente la joven miembro de mantenimiento que se había acercado corriendo a la Azafata, señalando al ventanal donde se veía la inmensa mole del Represor, interrumpiendo a todo el mundo -.

-        Sarhla, ahora no…

-        Pero…

-        No… vete… no ves que estoy muy ocupada… por favor…

-        Joven… creo que, en bien de todos los presentes, y antes de que alguien haga o diga alguna estupidez, sería aconsejable que terminase de contarle a su hermana lo que quería decirle sobre mi nave… -replico un sonriente Jhored señalando distraídamente hacia el Represor-.

-        ¡Es el Represor! Esa es la nave del heredero al Trono de la Confederación Imperial, es una pasada Lena… quizá incluso hasta el Príncipe haya llegado en ella, he visto su nombre desde uno de los pasillos inferiores de mantenimiento… -exclamo una muy visiblemente emocionada joven, provocando que tanto su hermana, como Dragos y el Coronel Krilos palideciesen-.

-        Lena… ¿Qué os pasa a todos? -pregunto la joven dirigiéndose hacia su hermana, Dragos y el grupo de protección de la Estación que miraban al grupo de Jhored… horrorizados-.

-        Selena… cuando desembarquen los Marines del Vengador los quiero a todos detenidos y los archivos de la bitácora, comunicaciones y navegación intervenidos… -Jhored señalo a la exclusa donde estaba atracada la nave que les quito el tercer anclaje-.

-        De inmediato… -Selena señalo a dos de sus compañeros que asintieron y se dirigieron hacia la esclusa justo cuando por la del anclaje del Crucero de Batalla Vengador aparecía un grupo de Marines con su equipación de combate al completo-

-        Ah, y dile a Tanya que organice también el asalto del resto de naves "no autorizadas" amarradas en puestos destinados al servicio de Parques. Una vez sus bitácoras y comunicaciones sean recuperados, las quiero todas ellas rumbo a la estrella del sistema tras conseguir todo lo que te he pedido antes... De sus propietarios ya se está ocupando Sigrid…

-        Si Alteza… -reafirmo Selena-.

Inevitablemente, tanto la presencia de los Marines del Vengador como el tratamiento que dio Selena a Jhored tras recibir sus órdenes, dejo a todos los presentes muy claro frente a quien se encontraban. Posiblemente quien peor se lo tomó fue la joven Sarhla quien casi se desmaya al comprender que efectivamente si, su Alteza si había llegado con el Represor, lo tenía justo delante de sus narices y al cual había interrumpido mientras este hablaba con su hermana. De hecho, su hermana tuvo que sujetarla con rapidez porque por un instante incluso se tambaleo…

 

CONTINUARA


10 comentarios:

  1. No sabes la alegría que me ha dado tu nuevo relato. Muchas gracias antes de leerlo, luego más.

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  2. Diariamente he entrado a tu página buscando una actualización a tu publicación. Gracias por seguir deleitándonos con tus relatos. Espero mucho leer pronto mas. Saludos !!

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  3. Hola! Qué alegría que hayas publicado de nuevo! También entro con frecuencia al blog por si envías algo. Muy agradecida y que venga la continuación muy pronto! Excelente relato como siempre.

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  4. Por fin, Shadow, joder, pense que te habia pasado algo

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  5. Yo también he entrado a diario para ver alguna actualización y aquí la tenemos, después de tanto tiempo por fin. Gracias, se te echaba de menos.

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  6. Buenas tardes, no sabes la alegría que me has dado al ver este nuevo libro. Muchas gracias Shadow

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  7. Que alegría, primero porque sabemos que estás bien de salud, luego por el relato. Saludos desde Cuba

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  8. ¡Qué alegrón leerte! Pedí noticias tuyas y las envías con Jored. Nuevamente mi gratitud por dedicar tu tiempo a las palabras y, también por tu generosidad en compartirlas. Redobló mi abrazo.

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  9. Como sabes por los demás lectores seguimos a diario tú página para saber de nuevas publicaciones
    Gracias por seguir publicando

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