Confederación Imperial Galáctica
Fecha estelar - 5345
Sector Chin
Órbita del Sexto Planeta
Superacorazado Colossus
Cuando el cuarto día desde que ordeno la
investigación sobre los cuerpos de los tripulantes del carguero, el Almirante
Tagard recibió una petición de comunicación de alta prioridad directamente del
General de Sanidad Bithorn, en el Elemental del Fuego, supo de inmediato que
había problemas y de los muy grandes… El General era uno de los mejores
investigadores de la CIG en varios ámbitos, entre ellos la genética, aunque no
hubo forma de separarle de la Flota, especialmente del Crucero de Batalla
Elemental del Fuego. Comunicarse con él, era una odisea, casi misión imposible
para cualquiera porque no atendía a nadie, su Alteza incluido, de modo que el llamase
directamente mediante alta prioridad era algo malo, pero que muy malo… Tagard
contesto preparándose para cualquier cosa, y ninguna buena…
-
Almirante,
tenemos problemas… y muy serios… -afirmo el General Bithorn-.
-
General, créame
que es algo que he supuesto desde el mismo momento en que usted personalmente
es quien pretende darme el informe de las investigaciones… ¿Qué pasa?...
-replicó Tagard, arrancándole una sonrisita al general-.
-
En primer lugar,
todos los cuerpos que hemos examinado han sufrido modificaciones Genéticas.
Aunque no puedo garantizarlo al 100%, preliminarmente todo apunta a que es el
mismo proceso que sufrieron los Warxos, aunque en diferente zona de su árbol
genético…
-
¿Está
completamente seguro de esto? -preguntó Tagard, aun sabiendo perfectamente que
el General no hacia nunca suposiciones gratuitas-.
-
Del todo, aunque
me gustaría verificarlo con los archivos del centro de investigación del
sistema Cruxars, pero si… el proceso es excesivamente similar como para que no
sea el mismo… No obstante, ya le advierto de que en cuanto comuniqué estos
datos y lleguen al centro de Cruxars, va a recibir usted peticiones urgentes
para que envié sujetos de muestra… -dijo el General-.
-
¿Sabe en que
incide esa alteración genética?
-
No, estudiarlo
llevara un tiempo, algunos de los cuerpos están bastante dañados y nos falta
bastante equipo, como mucho quizá pueda darle una idea aproximada de lo que sea
que pretendan… Pero si queremos datos específicos habrá que mandar cuerpos “completos”
a los Laboratorios de Cruxars que son los que más experiencia tienen con este
tipo de manipulación…
-
Entiendo… es…
cuanto menos preocupante…
-
No Almirante, aún
no he llegado a lo realmente preocupante… esto posiblemente sea una nimiedad
-replico el General en tono sombrío-.
-
¿Qué quiere decir?
-
Vera, cuando
estudiamos los cuerpos obtenidos en la nave no encontramos nada más allá de sus
alteraciones genéticas. Pero, cuando comenzamos con los que el Coronel Ho-kards
recupero del espacio, en dos de ellos descubrimos algo bastante perturbador…
Creo que todos los tripulantes llevaban algo insertado en sus cráneos, concretamente
en una zona muy determinada del interior de sus cerebros… -dijo el General-.
-
Como… ¿saben el
que y para qué sirve? -replicó Tagard reincorporándose de golpe en su sillón-.
-
En los dos cuerpos
recuperados del espacio que analizamos primero descubrimos que en sus cerebros
había algo orgánico en un rapidísimo proceso de desintegración. De hecho, en
los doce restantes que también se recuperaron del exterior ya no existía ese
“lo que sea”. Todo lo que hemos podido estimar es que es orgánico, aunque
estamos seguros de que también con algún elemento “extraño” incorporado, posiblemente
este lo que sea haya sido creado mediante bioingeniería. Hemos determinado que
su tasa de desintegración total se estima entre los 70 y 105 minutos tras la
muerte del sujeto.
-
¿Sabe porque
únicamente aparecía en esos dos cuerpos? -preguntó Tagard-.
-
Lo descubrimos
gracias a que al ser lanzados al espacio esos dos cuerpos permanecieron
congelados el tiempo suficiente antes de comenzar su análisis, por lo que la
desintegración se detuvo en seco hasta que recuperaron una temperatura
“normal”. Estimamos que quince minutos más de demora en su estudio en ellos y
no habríamos encontrado nada de nada…
-
Bien, entiendo… ¿alguna
idea de para que sirve o que es lo que hace en sus cerebros?
-
No, es imposible,
llegamos a ello en los últimos estados de desintegración. De hecho, el único
motivo por el que sabemos que todos los cuerpos han tenido ese “lo que sea” en
sus cerebros, es porque al desintegrarse ante nuestros escáneres en los dos
especímenes en donde lo detectamos, pudimos encontrar ciertos parámetros y
elementos que luego hemos verificado en el resto de tripulantes. Ni aun con un
examen exhaustivo habríamos podido encontrarlo en el resto de cuerpos de no
saber exactamente qué era lo que buscábamos y en dónde.
-
Esto nos deja con
un problema serio, vamos a necesitar más sujetos si queremos saber qué es lo
que hace… ¿no es así? -preguntó Tagard mirando al holograma del General-.
-
Si, si quiere que
averigüemos algo, vamos a necesitar más ejemplares para su estudio. Y
Almirante, me refiero a ejemplares “vivos” y en las mejores condiciones físicas
posibles… Además, también deberíamos de mandarles varios de esos ejemplares “vivos”
al centro de investigaciones de Cruxars si queremos respuestas concretas y
específicas, tanto de eso “lo que sea” como de sus alteraciones genéticas.
-
¿Podrá usted
adelantarnos algo a ese respecto? -pregunto Tagard-.
-
Almirante, por
mucho que yo quiera, mis medios aquí son limitados, podre estudiar y avanzar
algunas conclusiones, pero me es imposible garantizar nada completamente exacto
al respecto, no con el material de que disponemos…
-
Lo entiendo
perfectamente… además, como bien dice, en cuanto enviemos estos informes
querrán que mandemos ejemplares vivos para su estudio, y visto lo visto, en
cuanto lo vea su Alteza, sorpresa aparte, lo va a querer para ayer…
-
Bueno, en eso
quizá difiera con usted Almirante… hace dos horas solicite un informe a la
Genius sobre cualquier equipo médico o de investigación que tuviese en sus
depósitos como repuesto y me lleve una muy agradable sorpresa… Según parece,
“misteriosamente” se envió en el último carguero que trajo el Represor junto
con nosotros algún equipo de investigación genética avanzada por error y que
está a la espera de ser devuelto… Aunque es insuficiente para algo concreto y
especifico, sí que será de gran ayuda para lo que me pide…
-
General, no se
preocupe, se lo conseguiré de inmediato… -replico Tagard poniéndose en ellos al
instante-.
-
No se preocupe
Almirante… ya lo hice yo… Según parece, de nuevo “milagrosamente”, supongo que gracias
a alguien que no voy a nombrar y que incluyó específicamente mi autorización
personal, he podido “reclamar” ese equipo…
-
Voy a presuponer
que ese alguien ya suponía de antemano que íbamos a necesitar ese equipo… Me
encantaría que por una vez se dejase de juegos y explicase las cosas con
claridad… -refunfuño el Almirante Tagard-.
-
Venga ya
Almirante… ¿Pero porque cree usted que nunca respondo a nadie cuando trata de
comunicarse conmigo, y especialmente si es su Alteza?... Ese es el único modo
eficaz que conozco de no decir qué si a cualquier cosa que pretenda, aunque sea
por delegación y ni lo sepas en ese momento… -se rio el General-.
-
Ojalá pudiese
hacer yo lo mismo… -suspiro Tagard-.
-
Lo siento por
usted, pero creo que en todo esto no va a ser la última vez que nos la juegue…
Sí su Alteza ya había previsto algo como esto no confié en que no haya aún más sorpresitas
de las suyas… -replico el General-.
-
Lo sé, lo se… soy
plenamente consciente de ello… créame… Tagard fuera… -el Almirante corto la
comunicación-.
El Almirante Tagard se llevó las manos a
la cara suspirando profundamente. Era evidente que su misión se acababa de
complicar, porque como dijo el General Bithorn, en cuanto su Alteza y el Centro
de Investigación de Cruxars recibiesen los informes sobre ambos “asuntos” en
los cuerpos de esos tripulantes, de inmediato pedirían ejemplares vivos para
poder investigarlos. Además, antes de hacer nada debía de comunicarse con
Stratos, Alkard y Yue Fei para que estuviesen al tanto de estas “buenas”
nuevas, porque era evidente que las prioridades de todos ellos iban a cambiar
drásticamente… Y además, con todo esto, definitivamente quedaba meridianamente
claro que su Alteza estaba tramando algo muy, pero que muy gordo… Conociendo a
su Alteza, dado que a la vista estaba que se había tomado un muy elevado número
de molestias en ellos, mas incluso de las que se podrían considerar normales
viniendo de él, se podría aventurar ya que la Heredad MUM tenía los días
contados…
Si el Almirante Tagard tenían aun alguna
duda, apenas tres horas después de enviar a la Genius un archivo codificado
para su transmisión a su Alteza, a Inteligencia, a los Laboratorios de Cruxars
y a los otros tres Almirantes, en el sistema hizo su aparición estelar el
Crucero Ligero B-52, con sus bodegas repletas de capsulas Criogénicas con
destino a la Flotilla del Almirante Tagard… Si el Almirante quería ver aumentar
su dolor de cabeza por todo esto, únicamente tuvo que seguir la linea temporal
desde que envió el archivo codificado a la Genius, para darse cuenta que ese
Crucero con las Capsulas Criogénicas aun a su velocidad máxima, llegaba con al
menos dos o tres horas de antelación a lo que hubiese sido “normal”.
Todo indicaba que las Capsulas
Criogénicas ya estaban de camino a la Flota de Tagard cuando la Genius envió
esos archivos codificados al CIG por el agujero de gusano del Astillero Chin…
Una breve conversación de Tagard con el Comandante de la Genius le aclaro sus
dudas, y además, en varios aspectos. Según el Comandante de la Genius, en
cuanto el General Bithorn reclamo el equipo de investigación “enviado por
error”, se embarcaron en el Crucero B-52 todas las capsulas Criogénicas que
entraban en sus bodegas y se enviaron de inmediato a la flota de Tagard según
las ordenes previas de su Alteza Imperial recibidas junto con dicho equipo,
quien estaba claro que como siempre, parecía ir al menos una docena de pasos
por delante de todos los demás…
En menos de 24h Tagard recibió
comunicaciones de los otros tres Almirantes, dando órdenes Stratos para una
reunión de los cuatro en uno de los sistemas próximos a Nueva Chin con el fin
de tratar sus próximos pasos tras los nuevos descubrimientos. De paso, los
cuatro también iban con la sana intención de intercambiar opiniones sobre qué
demonios seria lo que estaba tramando su Alteza, porque había quedado más que
claro que algo de todo este nuevo lio sí que se esperaba que ocurriese…
Finalmente, tras la reunión, se decidió que
tanto la Estrella Oscura como las dos UNEX continuasen su misión original,
dando información sobre naves “MUM” para ser interceptadas y tratar de
localizar su mundo de origen, Tagard seguiría de igual modo ocupándose de
cualquier nave independiente localizada. Lo más peliagudo de todo fue la
petición especifica del General Bithorn sobre la necesidad de capturar también
ejemplares vivos procedentes de Naves Militares de los MUM. Esto último provoco
el cambio de órdenes para la flota del Almirante Alkard, ya que dada su
potencia de fugo serian quienes se encargarían del asalto de cualquier nave
militar o convoy de naves que fuese detectado. El Grupo de Combate Chin del
Almirante Yue Fei tendría que ocuparse en solitario del Sector Chin al completo
y cualquier operación contra los Xigord o sus aliados debían de ser suspendidas
hasta que se obtuviesen capturas de sujetos suficientes para las
investigaciones… Las capsulas enviadas mediante el Crucero B-52 fueron
divididas entre el Crucero de Batalla Elemental del Fuego de la Flota del
Almirante Tagard y el Superacorazado “Thalos” del Almirante Alkard, más de ciento
sesenta para cada uno. Ante el número, los Almirante asumieron que posiblemente
aquel carguero pesado que acompañaba al Represor en su última visita, no solo
transportaba equipo de investigación “erróneo” por orden de su Alteza.
Igualmente fueron reasignadas las 10
Torpederas Acorazadas del grupo del Almirante Alkard, pasando a realizar
también funciones de rastreo en zonas de baja densidad de tráfico comercial
limitando las UNEX a la exploración de las rutas más concurridas. Con esto último
se esperaba conseguir un incremento por leve que fuese en la localización de
posibles presas… Las naves Q por su parte intensificarían sus operaciones de
igual modo con el fin de tratar de desviar hacia el sector Chin un mayor número
de tráfico comercial del que poder sacar información, pese al riesgo de que se
infiltrasen grupos de piratas o naves Xigord tras la reducción de efectivos a
la única Flota del Almirante Yue Fei… Tanto en la Flota del Almirante Tagard
como en la del Almirante Alkard se intensificaron también los ejercicios de
Asalto por parte de los Marines de todas y cada una de sus naves… Para estos,
su misión se les acababa de complicar enormemente…
Tan solo tres días después del comienzo
de las nuevas operaciones, una de las Torpederas envió un mensaje codificado
mediante un micropulso dirigido al punto en donde se encontraba la Flota del
Almirante Alkard, transmitiendo la composición y dirección de un grupo de
naves… La composición era de tres grandes cargueros escoltados por dos naves de
guerra de un tamaño más o menos coincidente con el de un Destructor, con el
símbolo de MUM a sus costados, y una decena de Cazas. La Torpedera también
transmitió el origen de entrada al sistema, el rumbo que llevaban y el posible
punto de salto previsto para abandonar el sistema, así como las posibles
alternativas a donde ese salto pudiese dirigirles. El convoy fue localizado por
el Grupo de Combate del Almirante Alkard a dos sistemas de donde fue notificado
por la Torpedera.
El Almirante estimo que el asalto a las
naves fuese realizado por los Cruceros de Batalla del Grupo, mientras que los
escuadrones de Cazas Escorpión y Bombarderos Sable de los Superacorazados se
encargaban de la decena de Cazas defensivos del Convoy de todas las armas de
las naves del mismo. Los Cruceros de Batalla procederían a detenerlas antes de
su Asalto final mediante disparos de precisión dirigidos a las zonas de sus
motores… El objetivo final era la captura vivos de cuanto miembro de las
diferentes tripulaciones fuese posible, sin olvidarse se recuperar cualquier
posible información de sus bitácoras y diferentes bases de datos…
El capturar vivos a miembros de las
tripulaciones fue mucho más fácil decirlo que hacerlo, apenas consiguieron una
veintena de elementos de los más de quinientos que había entre las diferentes
naves… De esta veintena, solo uno era miembro de una de las dos naves
militares… Tan solo consiguieron hacer prisioneros vivos en los primeros
compases de los diferentes asaltos, una vez que las tripulaciones MUM se dieron
cuenta del detalle, procedieron a inmolarse mediante explosivos junto con
cualquier compañero que era neutralizado con vida mediante disparos
paralizantes. Finalmente, hicieron lo que más temían los mandos de los Marines…
volar los reactores de energía de sus propias naves con todos ellos dentro… Por
fortuna, lograron retirar las capturas y a ellos mismo a tiempo, apenas
tuvieron que contar con media docena de bajas propias y un par de decenas de
heridos de diversa consideración… Quedo claro tras el fiasco del asalto, que
tendría que cambiar la planificación y los métodos a emplear si querían de
verdad conseguir más ejemplares con vida…
Tras varias simulaciones y estudios
realizados sobre el discurrir del asalto, el Almirante Alkard y sus mandos de
Marines llegaron a la conclusión de que su única ventaja era el nulo interés
por la captura intacta de las naves y las armaduras de combate de los Marines… En
varios de los casos de heridos por parte de los Marines, estos habían sido
lanzados por las explosiones al vacío desde las naves de carga cuando los
tripulantes hicieron explotar los mamparos. Por fortuna, las armaduras de los
Marines y Marines de Asalto, excepto que sufrieran daños extremos, se
autosellaban al detectar el vacío del espacio a su alrededor, lo que les
confería al menos un par de horas de supervivencia para poder ser recogidos con
vida…
Se determino que, puesto que el único
interés real radicaba en conseguir información y ejemplares vivos de sus
tripulaciones, ciertas partes “conflictivas” de las naves deberían de ser
arrasadas mediante el fuego de las armas principales de Acorazados y Cruceros
de Batalla, aunque eso pudiese causar un número elevado de bajas entre sus
tripulantes… Consideraron que era mejor conseguir al menos unos pocos
ejemplares vivos que ninguno. El Almirante Alkard transmitió los datos y
estudios que habían realizado referidos al fallido intento al Almirante Tagard
para que lo tuviese también en cuenta.
El siguiente informe sobre un carguero MUM
procedió de la UNEX Espectro. Tomando en consideración la información
facilitada, los seis Cruceros de Batalla y el Superacorazado Colossus redujeron
a chatarra la zona posterior del carguero, partiendo prácticamente en dos la
nave por la zona cercana a los motores y el reactor. Mientras, los escuadrones
de cazas y Bombarderos del Colossus se encargaban de las torres de armas. Tras
el asalto del carguero por parte de los Marines de los seis Cruceros de Batalla
de la Clase Elemental, fueron capturados con vida diez de los treinta y ocho
tripulantes del Carguero… Una docena de ellos perecieron durante el brutal
primer ataque contra la parte posterior del Carguero y sus estaciones de armas.
El resto, principalmente pereció por inmolación mediante explosivos tratando de
impedir que se capturase a nadie con vida y llevarse el mayor número de Marines
posible con ellos… Los Marines de los Cruceros sufrieron tres bajas y una
decena de heridos de diversa consideración debido a los Explosivos,
principalmente los colocados sobre mamparos externos en diversas trampas…
Al igual que con el Asalto por parte del
Grupo del Almirante Alkard, todo pareció ir bien hasta el mismo instante en que
los tripulantes del Carguero se dieron cuenta de que estaban tratando de
capturarlos con vida. Fue a partir de ese momento cuando las cosas comenzaron a
torcerse de la peor manera. Pasaron de usar armas de energía o directamente
cuerpo a cuerpo, a prácticamente en exclusiva explosivos de alta potencia, ya
fuese en trampas o sobre si mismos y compañeros caídos inconscientes… Además,
en el puente sus tripulantes se volaron por los aires cuando los Marines llegaron
a su puerta, destrozando cualquier cosa valiosa que se hubiese podido encontrar
luego allí, bitácoras, etc… Los únicos tripulantes vivos capturados fueron los
que se lograron sacar en los primeros compases del asalto… Tras esto quedo
meridianamente claro que o buscaban una solución, o únicamente lograrían su
objetivo en los primeros momentos de cualquier asalto a una nave de MUM, además
de provocar la destrucción masiva de ciertas zonas sensibles de las que poder
sacar información.
Los siguientes ataques fueron por parte
del Grupo de Tagard sobre tres cargueros aislados en el plazo de un mes, en los
que probaron diversas tácticas además de estudiar detenidamente la construcción
y configuración de los sistemas de las naves. Estos estudios y pruebas tuvieron
una importancia capital para las futuras operaciones de la Flota del Almirante
Alkard, mientras que de paso iban cerrando la posición del mundo de origen de
dichas naves. En estos ataques apenas consiguieron capturar vivos una decena de
tripulantes en el conjunto de las tres naves, aunque la parte positiva fue la
completa ausencia de bajas propias en dichos asaltos. Finalmente, los altos
mandos de los Marines de las naves de Tagard llegaron a la conclusión de que el
método más eficaz de asaltar las naves y capturar vivos tripulantes, era
paradójicamente el más burdo de todos habida cuenta de un error catastrófico en
el diseño de las naves, al menos, en el caso de los cargueros, en el que todos
habían demostrado un diseño básico común entre ellos.
Mientras Tagard llevaba a cabo sus
“practicas”, el grupo de Alkard mediante las Torpederas Acorazadas vigilaba un
convoy de naves MUM compuesto por cinco cargueros pesados escoltados por seis
naves de guerra, dos medias y cuatro ligeras… Una vez recibieron las
conclusiones por parte del Grupo del Almirante Tagard, el Grupo del Almirante
Alkard puso en marcha un plan para hacerse con el control del convoy. Sin
embargo, se decidió centrar los intentos de captura en tres de los cargueros y
dos de las naves militares Ligeras. Se trataría también de tomar el resto de
naves, pero únicamente con el fin de recabar el mayor número de información
posible, por lo que tanto la estructura de dichas naves o sus tripulaciones no
eran importantes…
Antes del ataque, se movieron las
diferentes unidades de Marines de Asalto y grupos de Comandos de la Flota,
concentrando todas las fuerzas en cinco de los Acorazados, los cuales serían
los encargados de llevar a cabo los asaltos con intención de hacer capturas de
tripulantes. ¿El motivo?, muy simple, las armaduras presurizadas de estas
tropas, lo que les permitía combatir usando sus propias reservas de oxígeno
para respirar en el vacío. El error que las tropas de Tagard habían detectado
en las naves asaltadas, era la ausencia de sensores de control de atmosfera
bajo ciertos gases en los sistemas de “aireación” de las naves. Por ello,
asumiendo que todas las naves pudiesen funcionar igual, se decidió emplear
sistemas de alta presión de gases mediante depósitos enormes embarcados en Lanzaderas
de Asalto.
En dichos asaltos de Tagard se emplearon
diversos tipos de gases hasta que consiguieron encontrar uno que pareció ser
muy eficaz sobre los tripulantes, y que no disparaba las alarmas de
“contaminación” en las naves. Era un gas inicuo que provocaba en quienes lo
respiraban un leve mareo y una lenta perdida de consciencia, sin llegar al
desmayo, por lo que los tripulantes resultaban muy fáciles de derribar sin que
en ningún momento fueran capaces de saber que era lo que les estaba pasando. No
obstante, a que durante los cinco asaltos se capturo vivos casi al 90% de los
tripulantes que sobrevivieron a los disparos iniciales de las naves de Alkard,
muchos de ellos tuvieron que ser curados de diversas heridas, muriendo algunos
en el proceso.
Los Acorazados y Cruceros de Batalla
lideraron los ataques sobre el convoy para detenerles destruyendo sus zonas de
motores, mientras Cazas, Bombarderos, Cruceros Pesados y Ligeros se ocuparon de
destruir todos los sistemas de armas de las naves. Todo el convoy fue
capturado, sus bitácoras extraídas, sus sistemas y estructuras investigadas,
para después ser destruidas mediante los cañones de la Flota. En este caso, el
convoy fue un golpe de suerte, pues uno de los cargueros transportaba un tipo
de mineral cuyo exclusivo uso según todos los datos, se empleaba en los
blindajes que parecían usar las naves de Guerra de MUM, por lo que su ruta
reducía en mucho el área de búsqueda del mundo de origen para las UNEX.
CONTINUARA
Nunca te agradeceremos los suficiente que nos depares no estas maravillas de relatos. muchas gracias
ResponderEliminardesprendiz
ResponderEliminardepares con estas maravillas de relatos
ResponderEliminar