Confederación Imperial Galáctica

Libro - 11

Cruxars

5

Fecha estelar - 5335

11º Cuadrante Militar

Sistema Cruxars

Planeta Cruxars

Meseta

Los dos Clanes que ocupaban las entradas de ambos pasos, para sorpresa de inteligencia y del alto mando Khuetrian, contra todo pronóstico, parecían estar reuniendo tropas en grandes cantidades, y no precisamente con la intención de enfrentarse entre ellos. Esto significaba que no era para nada descartable un ataque en ambos pasos a la vez. Tanto el general Lonere en el paso de Tolgax, como el general Bursoss en el paso de Darvore, fueron advertidos por el estado mayor de la situación, con el fin de que se fuesen preparando para una posible invasión de ambos pasos a gran escala.

A mediados de la estación cálida los aparatos de reconocimiento localizaron dos potentes ejércitos Warxos en los aledaños de cada una de las entradas a los pasos. Lo grave de la situación, no fue detectar la presencia de guerreros de clanes diferentes a los dos colindantes con los pasos, lo que suponía un importante aumento de recursos para los dos Clanes y un incremento en la cooperación entre ellos, aun en dos facciones claramente diferenciadas. La estimación de tropas en cada grupo era de unos 150.000 jinetes de Gross, al menos 1.000.000 de tropas de infantería y entre 300 y 350 cañones de gran calibre de los denominados como "rompemuros". Lo peor llego cuando se detectaron cuatro fuerzas más, con piezas de artillería del tipo Bombarda, que se estaban internando en las montañas en dirección a la zona alta de ambos extremos de los dos pasos, esto implicaba un sutil cambio en la forma de proceder de los Warxos en sus guerras.

Ambos grupos parecían estar pensando y planificando prácticamente de la misma manera. Los cuatro grupos de ejercito que se internaban en las montañas estaban formados por unos 20 a 30 mil efectivos de infantería con aproximadamente 50 bombardas en cada uno, según las estimaciones de inteligencia, entre el 20 y 38% de esas tropas nunca llegarían a ocupar sus posiciones, las propias montañas se encargarían de eliminarlos. Si bien las defensas construidas en la zona superior de los pasos no tendrían problemas en terminar con ellos y evitar que pudiesen situarse en posiciones capaces de alcanzar las defensas del paso, por el contrario, los Warxos finalmente averiguarían la presencia de los Khuetrian en la meseta junto a su superioridad tecnológica, por ello se podía dar por sentado que su forma de actuar futura cambiaria drásticamente. En las fortalezas, murallas y bastiones de los pasos el blindaje de los muros había sido recubierto por piedra para camuflarlo y salvo graves daños difícilmente podría llegar a verse. Sin embargo, en la parte superior de estos no, las defensas superiores estaban montadas con el blindaje al descubierto, y organizadas en forma de tela de araña con el fin de cubrir el mayor terreno posible con el menor número de elementos, el inconveniente de esto es que tampoco se podía limitar su fuego… Siempre se había supuesto que en el momento en que dichas fortificaciones fuesen atacadas, es cuando comenzaría el verdadero periodo de guerra contra los Warxos.

Finalmente llego el ataque, los Warxos de forma muy inteligente, montaron enormes plataformas sobre las que situaron los grandes cañones, de ese modo podían disparar contra las murallas por encima de sus propias tropas. Su problema es que pese a situar estos a 1.200 metros de las murallas, en una distancia que pensaban segura, apenas fueron capaces de efectuar un disparo, fueron barridos en la primera andanada de las defensas. Los Warxos lanzaron su ataque comenzando de inmediato a disparar con los cañones, y entonces, se desato el apocalipsis sobre ellos… En ambos pasos, el mando dio órdenes de disparar con todas las piezas disponibles, con los cañones en posición de disparo de plasma a máxima potencia. Sobre los muros y torres, armas laser de fuego rápido fueron descubiertas de sus emplazamientos protegidos, las tropas comenzaron a su vez a disparar también a discreción sobre los atacantes, y los campos de minas fueron activados. En la zona superior de los pasos la situación para los atacantes fue aun peor, a las defensas estándar, casamatas, campos de minas y demás modelos habituales de defensas, también fueron activados Androides MKII que hicieron autenticos estragos entre las filas Warxos…

Si en los pasos la cantidad tan enorme de bajas Warxos no fue ningún problema, en las zonas altas fue otra la situación. Allí no tenían a su disposición los vehículos blindados lanzallamas, por lo que tuvieron que encargarse de los cadáveres "a mano". De ambos pasos, tanto en estos como en las zonas superiores, escaparon varios miles de guerreros con algunos de sus mandos, con ellos llevaban el conocimiento de que los Crux y los Xars, ya no estaban solos en su meseta, además del hecho ya obvio, de que las fortalezas situadas en ambos pasos para ellos, en ese momento resultaban inexpugnables por sus métodos tradicionales de enfrentamiento o que las armas que estos tenían superaban a las suyas en mucho. Lo único que permaneció oculto a los ojos de los atacantes fueron las fuerzas Aéreas, pues ni un solo aparato intervino en la derrota Warxos, aunque varios T2 estuvieron en todo momento monitorizando desde gran altura, fuera de la vista de los contendientes. Mientras, el resto de aparatos estuvo en todo momento en sus bases, armados, con sus pilotos en las cabinas y listos para salir a una orden del mando. Tras la debacle de ambos pasos, los Warxos no volvieron a intentar nada en esa estación, dándoles otro ciclo más de margen en sus planes de cohesión entre las tres razas.

Los siguientes seis ciclos se caracterizaron por continuas incursiones por las montañas en la estación cálida. Si bien los grupos de guerreros eran fácilmente localizables por su número, entre los 3.000 y 8.000, de los cuales aproximadamente la mitad nunca llegaban a cruzarlas, los equipos de cazadores resultaban más complicados de detectar, pues nunca superaban los 100 individuos. Gracias a la presencia continua de los drones en los cielos de las montañas, ni uno solo de ellos consiguió poner en peligro "real" a la población civil. Mientras que los Guerreros eran detectados poco después de internarse en dirección a la meseta, los Cazadores eran otra cuestión, pese a ser siempre descubiertos antes o después, y todos ellos sistemáticamente cazados por el ejército al abandonar las montañas e internarse en la llanura de la meseta. En varias ocasiones puntuales de acuerdo con un plan preestablecido al inicio de la presencia Khuetrian, el Alto Mando les "permitió" acercarse a estos cazadores a varias poblaciones pequeñas de las tres razas, pero nunca de modo que realmente pusiesen en peligro a nadie, pero sí de modo que los amenazasen con su mera presencia. Estas ocasiones, se permitió que se conociesen de inmediato y con toda la información disponible sobre ello, excepto evidentemente, que dichas incursiones habían sido "permitidas".

El séptimo ciclo trajo novedades importantes, pues una gran flota de invasión fue detectada en el mar Ártico del norte en el inicio de los deshielos, muchas naves se hundieron al chocar con estos cuando se resquebrajaban y cambiaban de rumbo repentinamente. Finalmente consiguieron llegar a las costas norte de la región, desembarcando un contingente de unos 45.000 guerreros Warxos, 3.500 de ellos montados sobre Gross… Para su desgracia, la flota fue avistada por los T2 que patrullaban la zona del Mar Ártico con tiempo suficiente como para desplegar la Brigada Acorazada y tenderles una emboscada. Mientras las tropas de la Brigada masacraban a los guerreros, los T1 armados con cohetes incendiarios de cabeza múltiple se encargaban de la flota, quemando y destruyendo los barcos de madera que habían logrado llegar hasta allí. No hubo supervivientes que pudiesen informar ni de la Brigada Acorazada, ni de los aparatos aéreos que les habían combatido, ni de la potencia de las armas empleadas contra ellos.

Estos hechos tuvieron consecuencias en la población de los tres pueblos. La población civil había asumido que las Fortalezas de los dos pasos eran el perfecto bloqueo a los ejércitos Warxos, y que de tratar de atravesar las montañas pocos serían los que llegasen, de los cuales además se encargaría el ejercito casi de inmediato no bien pusiesen el pie en la meseta, tal y como había sucedido hasta el momento, la sensación entre el pueblo de era de total seguridad. Pero este intento de Invasión en el Norte y posterior combate tuvo el efecto de despertar a la población civil de su sueño de invulnerabilidad, se dieron cuenta de que los Warxos continuarían tratando de llegar hasta ellos una y otra vez, que no cejarían de intentarlo. No obstante, aún se sentían seguros, pues desde que los fuertes se terminaron no había habido bajas entre la población civil a causa de los Warxos.

En los tres ciclos siguientes la situación se fue enrareciendo poco a poco, algunas voces comenzaron a sonar pidiendo que se montase algún tipo de ofensiva de castigo, que se hiciese algo para alejarlos del otro lado de las montañas de modo que no pudiesen seguir tratando de cruzarlas. Por fortuna para el gobierno de la meseta, en ese periodo no hubo ningún tipo de intento nuevo de los Warxos de invasión a gran escala, más allá de los "habituales" de cruzar por las montañas para ser masacrados nada más abandonarlas excepto como ya se dijo, en momentos y lugares puntuales. Pero el décimo primer ciclo trajo una nueva y desagradable sorpresa, los T2 de reconocimiento localizaron lo que parecía la formación de un nuevo y poderoso ejército Warxos de invasión a unos 35km de la entrada del paso de Tolgax, se calculaba que podrían llegar a superar de largo los dos millones de efectivos, y aún seguían incorporándose más Guerreros.

Justo cuando esa enorme cantidad de tropas entraban en el paso de Tolgax en dirección a la fortaleza que lo cerraba, uno de los Drones que controlaban esa zona emitió una alerta. Al menos algo más de un centenar de lo que parecían ser algún tipo de dirigible se dirigían también hacia la fortaleza del paso. Estas "naves" estaban formadas por un enorme Globo alargado, bajo el cual, de la zona central hacia adelante, colgaba algo parecido al casco de un barco lleno de guerreros Warxos, mientras que al final del globo había una pequeña barquilla de la que parecían partir dos grandes hélices, una a cada lado que hacían las veces de timón. Por lo que mostraban las imágenes, estas hélices debían de ser movidas por Guerreros situados en esa última barquilla mediante algún tipo de mecanismo manual, lo que hacía que su maniobrabilidad fuese muy escasa, aunque si lo suficiente como para poder orientar perfectamente la dirección de avance de la nave. La situación estaba muy clara, mientras el ejercito avanzaba por el paso, esas naves caerían desde el aire sobre la fortaleza, dejando directamente sus tropas embarcadas en su interior… En otras circunstancias habrían podido tomarla sin muchas dificultades una vez los Guerreros estuviesen dentro, pero para su desgracia, sus enemigos tenían a su vez fuerzas aéreas, que eran más poderosas, maniobrables y veloces. Por orden del estado mayor se dejó que dicho ejercito Warxos se acercase hasta 5 kilómetros de la fortaleza, luego, se dio la orden a la totalidad de los T1 de que interceptasen y destruyesen todos los globos que se dirigían hacia la fortaleza, mientras desde esta la artillería comenzaba a barrer todo el paso hasta su máximo alcance… 30km…

Los T1 fueron armados con cañones rotatorios electromagnéticos que disparaban munición incendiaria. No hace falta decir el efecto de dicha munición sobre los globos aerostáticos, que como suponía el mando, estaban llenos de gases inflamables… De los más de dos centenares de Globos que se dirigían hasta la fortaleza de Tolgax, apenas cuatro o cinco fueron capaces de llegar a tierra de un modo más o menos controlado, el resto cayó del cielo de forma violenta envueltos en llamas. Pese a que una vez derribados los T1 se dedicaron a tratar de eliminar a todos los supervivientes de los globos mientras los T2 bombardeaban a las pocas tropas que lograban retirarse por el paso, resulto inevitable que hubiese supervivientes que contaran lo que había ocurrido. Desde se momento, también la última carta de triunfo de los Khuetrian estaba sobre la mesa…

Los Warxos ya sabían que en la meseta también tenían aparatos voladores mucho más poderosos y avanzados que sus "globos". Esto no era un gran problema en el sentido de que los Warxos no podrían construir nada que se acercase a las capacidades de los T1 o T2, sin contar con los aparatos Escorpión y Sables de que disponían, los cuales aún no habían llegado a utilizarse más allá de usos de entrenamientos para los pilotos. El problema que surgió es que, hasta ese instante, el único motivo por el que habían podido acallar las voces que pedían hacer algo contra los Warxos, era precisamente la necesidad de no descubrir la presencia de fuerzas aéreas, para poder guardarlas como carta de triunfo en caso de una invasión a gran escala… Tras quedar estas al descubierto, esas voces volvieron a resurgir, esta vez con una fuerza aun mayor… Ni al Tol Kraal, ni a los Torxars de los Crux y Xars se les escapo que esto no era otra cosa que un intento de tomar el poder por esos supuestos "descontentos"…

Contra esta situación el Tol Kraal tenía dos opciones, reprimirlo por la fuerza, o como pensó sonriendo para si cuando los informes llegaron a sus manos, seguir las "sugerencias" que en su momento le entrego su Alteza Imperial, el cual nuevamente, había realizado una de sus "imposibilidades". El Príncipe Jhored había anticipado la situación actual incluso antes de que nadie desembarcase en el planeta. Como dijo cuando su Alteza le entrego sus apreciaciones, no se las había tomado a broma y de hecho, desde el principio se había estado preparando para esta situación en concreto, de no ser por ello, las decisiones que se habría visto obligado a tomar podrían haber terminado en un auténtico desastre a largo plazo. No pudo evitar soltar una carcajada cuando pensó que contra lo que hubiese tenido que hacer en circunstancias normales, que es reprimir estas "ideas", con el plan de su Alteza, era todo lo contrario, desde las sombras debía de "alentarlas", hacer que creciesen hasta que fuesen un clamor entre los tres pueblos y ello les obligase a los dirigentes a actuar contra los Warxos… Aunque mas de uno al final, se iba a llevar una desagradable sorpresa…

Tal y como se había previsto, en un momento dado no les quedó otro remedio al gobierno de los tres pueblos a planificar la invasión del territorio Warxos con el fin de darles un escarmiento y que no tomasen el poder los elementos más radicales, que era en realidad lo que traban de hacer. Cuando esto se dio a conocer la población en general estallo en jubilo… aunque les duro poco más de cinco meses dicha alegría, justo el tiempo que el plan trazado en origen por su Alteza Imperial comenzó a dar sus frutos, o quizá fuese mejor decir, a dar sus primeros quebraderos de cabeza a los "belicosos".

 En el sexto mes, tras comenzar con los primeros movimientos para llevar la ofensiva a cabo, la opinión del pueblo comenzó a cambiar drásticamente. Dado que la fuerza aérea ya había sido descubierta, se comenzó por bombardear de forma masiva por los T1y T2 todas las poblaciones Warxos situadas a menos de 100Km de los dos pasos. De inmediato tras el inicio de estos ataques se decretó la movilización total del ejercito con rumbo a los dos pasos, así como la redistribución de recursos de transporte y el inicio de la reestructuración de la industria con el fin de fabricar lo más rápido posible para su reposición, los pertrechos militares que desde los primeros bombardeos ya se estaban gastando.

Esto supuso que en muchos sitios tuviesen que volver a recurrir a los antiguos medios de transporte, las carretas tiradas por animales. De mismo modo muchos productos no esenciales dejaron de fabricarse de modo inmediato, también otros muchos quedaron "racionados", generando el descontento por la situación. Pero con todo, eso no fue lo peor para la población más allá de la evidentemente perdida de "calidad de vida". Eso llego cuando se dieron cuenta que tanto las guarniciones situadas entre ciudades como las patrullas destinadas a proteger las rutas de posibles incursiones Warxos fueron retiradas hacia ambos pasos para la ofensiva general que tanto se había pedido. El remate de la situación llego cuando se ordenó que todos los miembros en edad militar de las tres razas no integrados en el ejército, debían de pasar por las armerías para pertrecharse con el fin de poder defender sus poblaciones en el caso de que los Warxos entrasen en la meseta mientras las tropas estaban en su ofensiva.

Las fuerzas presentes que restarían para defender a la población de toda la meseta se estimaban en poco más de 20.000 efectivos, lo que implicaba que cada ciudad debería de resistir por su cuenta en caso de ataque hasta que estas tropas fuesen capaces de acudir en su ayuda. El siguiente mazazo para la población llego cuando gracias a las familias de los propios militares se comenzaron a dar cuenta que tras la estación cálida todas las tropas quedarían al otro lado de las montañas sin que pudiesen acudir en ayuda de nadie en caso de que los Warxos volviesen a aparecer por el norte o por el aire, sin contar con el hecho de que de irles mal las cosas tampoco tendría forma de retirarse a un lugar seguro… Desde el principio toda la población de las tres razas en edad militar tuvo que pasar una semana de cada ciclo en instrucción militar para por lo menos ser capaz de manejar un arma con cierta soltura. La idea era simple, en caso de necesidad, esa población seria quien se ocupase de las murallas junto con las guarniciones para darles los minutos necesarios a las tropas de apoyo a llegar y destrozar a cualquier Warxos que hubiese llegado a colarse hasta una población. Algo que a nadie preocupo, pues al tener junto a ellos a tropas entrenadas lo veían mas como una experiencia que un peligro real para sus vidas.

El plan ideado por su Alteza fue simple, primero acostumbrar a la población civil de las tres razas a toparse con tropas de forma continua en sus desplazamientos entre poblaciones o en el interior de las mismas, para que la repentina desaparición de estas fuese un auténtico shock para muchos. Dejar que varias incursiones de cazadores Warxos se acercasen lo bastante como para que se pensase que si no había ocurrido nada era gracias al patrullaje de las tropas. Luego debía de esparcirse los rumores recordando que habían sido estas patrullas que ahora no existirían, las que en diversas ocasiones habían interceptado a los cazadores Warxos que habían "logrado" introducirse en la meseta sin ser "detectados"... o lo que es lo mismo, los que en secreto permitieron acercarse demasiado a la población siendo interceptados en el último instante.

El siguiente movimiento consistió en poner armas en manos de la población, y organizarlos con el fin de "defender" ellos mismos y prácticamente por sí solos, sus ciudades, sin las tropas entrenadas a su lado. Luego, una vez comenzadas las operaciones quitarles de golpe todas las comodidades que poco a poco habrían comenzado a disfrutar para apoyar el "esfuerzo de guerra", remontando la situación a los primeros años tan duros de la llegada Khuetrian. Y para terminar, del mismo modo hacer hincapié en el hecho de que fuera de la estación cálida, de igual manera que a los Warxos les era prácticamente imposible cruzar por medios normales a la meseta, a las tropas propias les pasaría igual, por lo que la población en ese tiempo, quedaría a sus propias fuerzas si los Warxos encontrasen algún modo de cruzar sin ser detectados por las fuerzas aéreas… Del hecho de que si algo salía mal las tropas no tendrían tampoco donde poder retirarse de forma segura, se encargaron de extender los mismos soldados y sus familiares…

Repentinamente a la mayor parte de la población civil de las tres razas, la idea de darles a los Warxos un escarmiento más allá de unos pocos bombardeos de castigo, ya no le pareció a nadie tan necesaria… La falta de presencia de las tropas a las que se habían acostumbrado, el hecho de que estas cuando la estación cálida terminase quedasen aisladas de la meseta con el riesgo incluido de que dada la enorme superioridad numérica Warxos terminase por vencerlas, más el que se les pidiese a ellos que defendiesen prácticamente en solitario durante mucho tiempo sus poblaciones en caso de ataque, y para rematarlo la falta repentino de esos elementos de "comodidad" a que se habían acostumbrado, provoco un giro de 180º en la forma de ver todo este asunto por parte de la población.

Pese a que finalmente la invasión de territorio Warxos fue cancelada y los "díscolos" acallados por la propia población, parte de la cual incluso pidió severos castigos para ellos por su "estupidez", la escasez de determinados productos se mantuvo a propósito durante unos meses hasta que todo lo que la fuerza aérea usó fue repuesto. Este simple hecho de la falta de "suministros" civiles pese a suspenderse todo, fue un severo acicate para que vistos los ánimos generales y lo que ocurría cuando alguien hacía mención de "salir" a por el enemigo. Las voces "díscolas" permanecieron en silencio, pues normalmente tendían a callarles por las malas. En ciclos sucesivos, toda voz que tuvo la mala idea de levantarse para pedir medidas "ofensivas" contra los Warxos, fue literalmente "aplastada" por la propia población, que no quería escuchar hablar de la marcha de las tropas fuera de la meseta. Del mismo modo que anteriormente, a varios grupos de cazadores fue permitido adentrarse en la meseta para finalmente ser eliminados por las tropas de patrulla de las fortalezas de protección de las rutas de comunicación. En los siguientes ciclos se sufrieron más intentos de ataques masivos Warxos siendo todos ellos rechazados sin prácticamente perdidas, pero en al menos un par de ocasiones, se les dejo avanzar lo suficiente como para tener que recurrir a toda la potencia de fuego de dos Brigadas completas, 100.000 soldados, contra ellos para poder pararles.

El más serio fuera de los "permitidos", fue el que intentaron llevar a cabo cruzando con los globos las montañas cerca del norte, protegidos por lo que parecían ser biplanos con motor de combustión y que fueron arrasados por los T1 sin darles tiempo a llegar hasta la meseta. Tras esto, el alto mando decidido enviar a los Bombarderos Sable con tres de las cinco bombas perforantes termonucleares de un megatón de que disponían, con el fin de destruir las tres minas de mineral de alta calidad existente en el continente… Esto supuso un fuerte golpe para la industria militar Warxos… Sin embargo, no todo salió según se planeó, pues tuvo el efecto negativo de unir en una alianza a todos los grandes clanes Warxos del continente, y varios de otros lugares… Esto significo un incremento en las tropas Warxos disponibles para poder lanzar sobre la meseta, así como el que llegasen al continente metales de calidad procedentes de las otras minas existentes en el planeta. Finalmente, el Alto Mando decidido usar las siete bombas restantes con los Bombarderos Sable, dejando tras ellos únicamente en pie cuatro minas de mineral de calidad en todo el planeta…

Desgraciadamente para los Warxos, esta unión entre sus clanes, dejando de lado su tradicional enemistad, en realidad no suponía nada que fuese problemático para las razas de la Meseta dada la enorme superioridad tecnológica existente y lo fuertes que eran sus defensas en los puntos más vulnerables, los dos pasos…

Finalmente a los Warxos les costó cuatro ciclos comprender que la Artillería defensiva de las Fortalezas de los Pasos tenían la capacidad de barrer prácticamente toda la longitud de dichos lugares… También descubrieron, si bien no los Drones, si a los T1 y T2 que continuamente patrullaban los cielos, haciendo imposible un ataque por sorpresa en los pasos con tropas suficientes como para poder hacer algo significativo.

EPILOGO

Durante todos los ciclos transcurridos desde que los Khuetrian aterrizaron, hasta que la alteración temporal con el resto de la galaxia se "niveló", la población de la meseta en ningún momento corrió el menor riesgo real de caer bajo las armas de los Warxos… Buena parte de esto fue el progresivo aumento tecnológico de la meseta a medida que su industria se desarrollaba, la constante llegada cada cuatro a cinco ciclos de enormes cargueros procedentes de la Confederación Imperial, con metales aleados de alta calidad que no existían en el planeta, que fue lo que permitió tal desarrollo y la creación de una nueva División de Guarnición para la meseta. Cincuenta y seis ciclos después de la llegada de los Khuetrian, comenzó el relevo generacional en los principales puestos del Triconsejo, así como poco a poco del mismo modo se fue relevando los principales mandos militares…

Ochenta y nueve ciclos después de la llegada Khuetrian, el tiempo entre el planeta y el resto de la Galaxia por fin se nivelo. Entonces la población de las razas de origen de la Meseta pudo comprobar de primera mano aquello que los Altos Mandos Khuetrian prometieron cuando llegaron, que, al nivelarse el tiempo, los mundos a los que ahora pertenecían enviarían ayuda para terminar de una vez por todas con la amenaza Warxos… Un ciclo después de que el tiempo se nivelase, 92 Divisiones de Asalto del Ejercito desembarcaron en Cruxars, a la vez, las 3 divisiones y la Brigada Blindada existentes por entonces, fueron reequipadas con material de última generación. También se inició de inmediato la construcción de los puntos fortificados para los generadores de Escudo de debían de proteger el Planeta de cualquier agresión exterior. El Continente quedo limpio de Warxos tan solo dos ciclos después, comenzando entonces la conquista del resto de sus territorios de Ultramar. Diez ciclos después fueron completamente exterminados pese a los continuos intentos infructuosos de corregir sus taras genéticas.

Para cuando Cruxars por fin se unió al resto de la Confederación imperial, ya estaban en funcionamiento trece de las denominadas como "puertas de gusano", una más de las previstas inicialmente por su Alteza Imperial. Se situaban una en cada uno de los once Distritos Militares, justo en el sistema de la principal base de la Flota del Sector, otra en el sistema Capital, y la última, la añadida por su Alteza a última hora en la planificación, situada en el interior del propio sistema Cruxars, al que únicamente estaba permitido acceder por dicho lugar… Durante todo el tiempo transcurrido desde la llegada de los Khuetrian hasta que el tiempo se nivelo, casi cinco Años Galácticos, uno de los descubrimientos mas impactantes sobre el sistema, y que tenía a los científicos completamente desconcertados por no ser capaces de darle una explicación viable, era el hecho de que excepto en la zona mas exterior del sistema, era imposible determinar con exactitud la posición del mismo dentro del Brazo de la Galaxia. Cuando esto se constató, su Alteza Imperial decidió de inmediato la construcción de una nueva Puerta en el sistema con el fin de proteger su ubicación de modo eficaz permitiendo solo su acceso a través de ella, fortificando además el sistema frente a cualquier intento de invasión externo.

En este periodo de cinco años Galácticos, bastantes cosas transcurrieron para la Confederación Imperial… y no todas fueron buenas…

FIN