miércoles, 11 de marzo de 2020

                     Confederación Imperial Galáctica

Libro - 11

Cruxars


4







Fecha estelar - 5335

11º Cuadrante Militar

Sistema Cruxars

Planeta Cruxars

Centro de Mando Khuetrian


A las dos semanas de terminarse por fin las obras relativas a las fortificaciones de los dos grandes pasos hacia la meseta, en el centro de mando se recibió una alerta transmitida por uno de los Drones Aéreos de Reconocimiento. Estos aparatos eran de la poca tecnología de ultimísima generación que había sido llevada al planeta por los Khuetrian, cada Dron completamente automatizado asemejaba a una especie de ave local, a las cuales imitaba en sus patrones, en sus entrañas llevaba un sofisticado equipo de rastreo. Mas de 500 de estos aparatos estaban disponibles para su uso, una veintena estaban de forma constante en vuelo en la zona de los pasos, tres más en el frio norte, controlando los accesos por el gélido Océano que bañaba aquellas costas, pese a que allí, en la estación cálida que comenzaba, era época de huracanes y fuertes tormentas... Finalmente un centenar más cubría el resto de las montañas…



Siguiendo el protocolo establecido para estos casos y con el fin de no apartar a los Drones de su "comportamiento" acorde a su apariencia, desde allí se ordenó que un T2 de reconocimiento equipado con elementos visuales y de rastreo se dirigiese a toda velocidad hacia aquella posición para evaluar la situación. Solo una hora después, el Tol Kraal recibía la noticia de que los Warxos se dirigían hacia la Fortaleza de Darvore, en el paso del mismo nombre. Se estimaba una fuerza de unos 9.000 efectivos de infantería con "ganado", compuesto por miembros de ambas razas, y diversa impedimenta tras ellos. Según los datos obtenidos, posiblemente buena parte de esta "impedimenta" se tratase de los elementos mínimos necesarios para la construcción de un campamento fortificado en la zona de acceso a la meseta desde el paso… 

La situación fue puesta de inmediato en conocimiento del mando responsable de la Brigada de Artillería reforzada de Guarnición en la Fortaleza del Paso de Darvore. Las órdenes para el general al mando de la Fortaleza estaban muy claras, debían de destruir las fuerzas enemigas, pero mostrando tan solo el potencial preciso para ello, ocultando las verdaderas capacidades defensivas de la Fortaleza y sus unidades adscritas. Si algo tenía claro el General N'ralls, el Tol Kraal, es que los Warxos antes o después cambiarían de tácticas. En cuanto se diesen cuenta de la inutilidad de tratar de conquistar los pasos por la fuerza cambiarían sus patrones, pero contra más tardasen en ello, tanto mejor para todos, más tiempo ganaban para poner la meseta en funcionamiento. Confiaba en poder disponer al menos de dos años completos antes de que los Warxos se diesen cuenta de la verdadera magnitud de la potencia real de fuego de ambas fortalezas.

El General Bursoss, al mando del Fuerte Darvore dio órdenes precisas de que las defensas de las fortificaciones no interviniesen, y que la Artillería de la Brigada hiciese sus disparos en orden por Batallones de 1 de cada 5 piezas a intervalos de 20sg. Eso suponía que cada uno de los diez Batallones de la Brigada abriría fuego con tan solo 100 piezas de Artillería de forma escalonada a una distancia máxima de 1km. Cada Batallón Disponía de un total de 500 piezas de Artillería mecanizadas con capacidad tanto de disparar proyectiles cinéticos de trayectoria libre o guiada con hasta 1500kg de carga explosiva estándar, así como energía de plasma regulable hasta un máximo equivalente a unos 5000kg de fuerza estándar. Obviamente, de disparar todas las piezas a la vez con fuerza máxima, habrían arrasado a los Warxos con la primera andanada, pero ese poder precisamente era lo que el Alto Mando trataba de evitar que el enemigo descubriese… aún…

Al Lado del General Bursoss se encontraba Trigredd, el *Serlem de los protectores Cruxars asignados a la Fortaleza, y al cual tuvo que explicar los motivos de no destruir completamente lo antes posible a los Warxos que les atacaban, así como el motivo de que solo fuesen visibles para los enemigos los Protectores Cruxars que estaban en la fortaleza… Obviamente, lo que no querían tampoco es que los Warxos supiesen antes de tiempo que tenían nuevos enemigos con los que tratar… Mientras pensasen que tenían que enfrentarse a los protectores Crux o Xars, serían ciertamente bastante previsibles en sus intentos de tomar las fortalezas, lo que los llevaría al desastre…

Lo cierto es que el enfrentamiento dio para poco más que el que las dos razas, los Crux y los Xars se alegrasen al conocer la noticia de la destrucción del ejercito Warxos que trataba de acceder a la meseta por el paso. Apenas 200 lograron escapar de la masacre, muchos de ellos heridos de gravedad. Tanto el General Bursoss como el Estado Mayor Central sabían de sobra que los Warxos volverían, y esta vez, lo harían con un ejército más potente con la intención de destruir o más probablemente, tomar, las fortificaciones construidas en el paso… El problema con el paso, es que su anchura en su sitio más angosto, que era donde estaba construido el fuerte con las murallas y los bastiones, impediría que cualquier ejercito por poderoso y numeroso que fuese pudiese desplegarse de forma óptima. De hecho, cualquier estratega que lo pensase dos veces, se daría cuenta de que contra más tropas contase, peor serían las consecuencias y más "fácil" su derrota completa, especialmente dada la brutal superioridad tecnológica de los Khuetrian. A mayor número de tropas, mucho más difícil seria poder tomar a los defensores por sorpresa… Pero claro, los Warxos desconocían por completo la existencia de la nueva raza y su superioridad tecnológica, algo que como ya se dijo, el Tol Kraal quería mantener en secreto a toda costa.

Un problema al que el General Bursoss tuvo que hacer frente tras su victoria, fue a que hacer con la repentina cantidad de muertos presentes ante las fortificaciones… El dejarlos allí no era una opción, al pudrirse la gran cantidad de cadáveres de los Warxos podría llevar aparejado que se desarrollase algún tipo de enfermedad, y si bien el deshacerse de esos pocos miles no iba a ser un problema aun el caso de tener que deshacerse de ellos a mano, en los siguientes ataques que se preveían, sin duda si lo serian… Otro problema era el acercarse a los "supuestos" cadáveres, si algunos se estuviesen haciendo los muertos, serian un peligro para las tropas encargadas al entrar en la cercanía del cuerpo a cuerpo dada la superioridad física de los Warxos.

Por fortuna, cuando presentaron la planificación a su Alteza Imperial, este se empeñó en que para dichas fortalezas se incluyesen un total de diez vehículos especiales por cada una de ellas y a los que nadie encontró utilidad ninguna en esos instantes. Estos eran antiguos unos antiguos vehículos blindados muy desfasados, denominados en su día como Tanque Lanzallamas. Fueron desechados décadas antes, cuando las armaduras de las tropas de infantería comenzaron a ser capaces de aguantar el fuego que estos vehículos podían lanzar, lo que les convirtió en obsoletos y auténticas trampas mortales para sus tripulantes. Pero en este caso, dichos vehículos, dotados en sus depósitos con un fuerte producto corrosivo de alto poder calorífico, resultaron extremadamente útiles para "reducir a polvo" los restos de las tropas Warxos que habían caído en combate ante la fortaleza.

De hecho, cuando los Tanques Lanzallamas salieron a cumplir con su misión, efectivamente un par de decenas de Guerreros Warxos que estaban heridos se levantaron tratando de atacar los vehículos. Una vez cerrados por la tripulación tras entrar a sus puestos, el Tanque Lanzallamas quedaba hermético y bloqueado para la apertura exterior, protegido entonces por su potente blindaje de alta calidad. Siguiendo las indicaciones que se recibieron por parte de su Alteza cuando se los asignó, estos trabajaban por parejas, de modo que no fue ningún problema el deshacerse de los Warxos que trataban de atacar al "compañero", tan solo necesitaron girar los cañones y quemarlos vivos con su fuego. Tanto el general N'ralls, como el General Bursoss, se dieron cuenta de que nuevamente una idea de su Alteza había demostrado su utilidad llegado el momento, y esta concreta de esos vehículos Lanzallamas, ciertamente era una de las que menos practica les pareció a todo el estado mayor Khuetrian cuando recibieron los informes definitivos de lo que les iba a ser suministrado. Por un lado, evitaba el problema de la acumulación peligrosa de cadáveres, y por otro mantenía a las tropas a cubierto y protegidas cuando tratasen de deshacerse de ellos…

Si el General N'ralls había calculado bien de acuerdo con todo lo que sabían sobre sus enemigos gracias a la investigación que el Vicealmirante Tol Komard había hecho mientras comandaba las fuerzas de protección del Sistema estelar Cruxars, gracias por cierto también a un pequeño comentario que su Alteza dejo caer en su presencia, la próxima intentona contra la fortaleza de los Warxos se llevará a cabo por tropas montadas en *Gross. Estas monturas eran más que capaces de trepar por los muros con sus jinetes encima. Como tropas rápidas era fácil pensar que en número suficiente serían capaces de llegar a las murallas, trepar y tomarlas, o al menos mantenerlas limpias de enemigos, hasta el momento en que la infantería pudiese alcanzarles y ocupar definitivamente la fortaleza. Por ese motivo se limitó el alcance de la artillería usada a 1km de distancia máxima. En realidad los cañones Khuetrian eran capaces de alcanzar más de 30km de distancia con la munición de carga mínima que se había usado, y unos 15 a 20Km en carga máxima.

Todas las observaciones realizadas hasta el momento, indicaban que los Warxos seguían un protocolo muy rígido a la hora de combatir, y siempre lo hacían del mismo modo mientras ciertas condiciones se mantuviesen. Parecían muy poco flexibles en sus tácticas o estrategias, incluso sus tropas equipadas con armas de fuego, tan solo hacían dos o tres disparos con estas contra el adversario mientras caminaban para llegar hasta el cuerpo a cuerpo, que parecía ser siempre el objetivo final en cualquiera de sus batallas. Incluso con Arcos o Ballestas, estos siempre se disparaban mientras avanzaban hacia su enemigo, tan solo permanecían estáticos los cañones, y estos ni una sola vez habían sido observados usándose fuera de asedios a lugares fortificados… Nunca se vio a la artillería en batallas en campo abierto. Militarmente parecía que su capacidad de innovación era casi nula, o más probablemente, su idiosincrasia les hacía reprimir cualquier intento de "mejorar" lo existente, parecía que su principal y única motivación al combatir era el cuerpo a cuerpo, algo para lo que sin duda estaban especialmente dotados…

El Estado Mayor Khuetrian pensaba que si no les daban motivos para variar ese comportamiento tan rígido, serian del todo previsibles, y con ello se podrían conseguir al menos otras dos revoluciones antes de que se diesen cuenta de que esas fortalezas eran inexpugnables, o de que una nueva raza estaba en la meseta, y tratasen de hacer algo diferente… Y ese tiempo añadido, les era a las tres razas enormemente necesario para llevar sus planes de desarrollo y protección de la meseta a un nivel aceptable…

Se aumento la presencia en ambos pasos del número de Drones de vigilancia, se habían destacado a territorio Warxos varios T2 equipados con equipo de inteligencia y observación, para que rastreasen todo posible movimiento de tropas en dirección a cualquiera de ambas fortalezas, lo que quería evitar el General N'ralls con esto es que no hubiese posibilidad de la menor sorpresa por parte de los Warxos... Justo cuando comenzaba a terminar ya la temporada "cálida" en las montañas, uno de los T2 detecto la presencia de fuerzas Warxos dirigiéndose nuevamente hacia el paso de Darvore, rápidamente, por orden del General Bursoss, se despachó una nueva unidad T2 reequipada con potentes equipos de grabación con la finalidad de que se evaluase la potencial amenaza que podría representar…

Finalmente se estableció la importancia de las fuerzas Warxos en unos 13.000 jinetes de Gross acompañados de una fuerza de unos 40.000 guerreros a pie, más otros aproximadamente 2.000 "esclavos" Cruxars con el bagaje que dichas tropas llevaban tras de sí… Por las imágenes tomadas, la forma de moverse, de comportarse, el mando estableció que, en realidad, posiblemente esos Cruxars fuesen reservas alimenticias para las tropas Warxos… La buena noticia, es que, siguiendo con su rigor habitual en sus guerras, esas tropas no llevaban consigo nada de artillería, incluso su infantería carecía de esas armas que inteligencia había clasificado como un tipo de mosquete. Pero eso mismo dejaba al general Bursoss con el problema de hacerles frente sin que les descubriesen, ni a sus tropas, ni la verdadera potencia de fuego oculta tras las impresionantes fortificaciones del paso, ní su verdadero alcance.

Según todos los datos obtenidos anteriormente, este nuevo ataque dejaba bastante claro el interés de los Warxos por mantener intacta la Fortaleza y aprovecharla para acantonar allí sus propias tropas. De no haber sido así, hubiesen contado con artillería, o por lo menos bombardas, y "armas de fuego" en sus tropas de infantería… También indicaba que desconocían la presencia de una raza extraña en la meseta, sin duda pensaban que la Fortaleza estaría protegida únicamente por unidades de los protectores Crux, los cuales, además, no podían ser tampoco muy numerosos según los datos que los Warxos podrían haber estado manejando. Si las sospechas de los Warxos hubiesen sido ciertas, con que tan solo un tercio de las Tropas montadas en Gross hubiesen llegado a lo alto de las murallas, los protectores Crux hubiesen estado acabados…

Cuando los Vehículos Lanzallamas destruyeron los cadáveres de los Warxos, el general Bursoss y en previsión del más que probable modo de ataque que usarían a continuación sus enemigos, había dado órdenes de que frente a las murallas se minase una zona de 300 metros, para ello se usaron minas "durmientes", que no se armaban si antes no recibían para hacerlo una orden codificada por radiofrecuencia de microondas, dicha orden podía ser tanto de armarse como directamente de detonar. En esta ocasión, a los Warxos además de la Artillería como la vez anterior, les iban a recibir, tanto las minas, como los tiradores Crux acantonados en la fortaleza y que habían recibido ya entrenamiento con los "modernos" fusiles con capacidad de disparar plasma y proyectiles electrocinéticos con que habían sido pertrechados, segunda modalidad de fuego, que sería la que usasen en todo momento excepto en casos puntuales en que su vida corriese algún peligro o algún Gross por un milagro llegase a lo alto de las murallas… Nuevamente la prioridad del General era que los Warxos fuesen derrotados de forma contundente, que no se variasen las condiciones específicas que les permitiese pensar en otras opciones diferentes a las habituales, y por supuesto, que sus tropas siguiesen permaneciendo ocultas a sus ojos.

Las tropas de Protectores Crux habían sido pertrechadas con una armadura flexible polivalente ligera del tipo Explorador, capaz de detener cualquier cosa que les disparasen los Warxos con excepción del impacto directo de un cañonazo, un Fusil Curzón de Plasma con rail de fuego electrocinético de proyectiles sólidos, 10 Cargas de Plasma de 50 disparos cada una, 12 cargas cinéticas de 15 proyectiles de plomo, 5 granadas expansivas de 200 gramos de alto explosivo comprimido, capaces de arrasar lo que hubiese a 5 metros de su zona de detonación y un cuchillo de combate de plastiacero de 40cm de largo que podía llegado el caso ser usado a modo de bayoneta… Además de todo esto, también seguían llevando su carcaj de 20 flechas cortas, aunque sus arcos de madera habían sido sustituidos por arcos desmontables de "alta tecnología" que mejoraban su alcance y puntería hasta en un 60%. Se podía decir que los Khuetrian habían armado a los Protectores Crux hasta los dientes, además de estar mejorando su entrenamiento militar en todos los ámbitos…

Las órdenes del General Bursoss fueron tajantes, al igual que la vez anterior, la artillería debía disparar por secciones en modo de 1 de cada 5 piezas, hasta un rango máximo de distancia de 1 kilometro, y un mínimo de 400 metros. Con ello quería dar a los Warxos una falsa sensación de seguridad sobre el alcance real de la artillería defensiva de la fortificación. Si los datos eran los correctos, tras este fracaso que iban a cosechar, su siguiente intentona seria con artillería, bien para destrozar las tropas sobre las murallas, bien para abrir en estas una brecha por la que poder penetrar en su interior… Las órdenes del Tol Kraal eran muy específicas, no podían hacer nada en ninguno de los dos fuertes, en caso de ser atacados, que pusiese en peligro la rigidez estratégica y táctica de los Warxos…

Tal y como se había previsto, los Warxos aparecieron antes las fortificaciones con su formación habitual en estos casos, en tres líneas a unos 1100 metros de distancia, fuera del rango de alcance teórico de los cañones defensores. La primera la formaban los jinetes sobre los Gross, la segunda, la infantería, lista para seguir a los jinetes en cuanto se pusiesen en marcha, y en la tercera línea, Arqueros que tratarían de que los defensores Crux no pudiesen asomarse mucho en las almenas… al sonido de los cuernos de guerra las tres líneas avanzaron a la vez en una velocidad cómoda que se rompió en cuanto los primeros proyectiles de artillería comenzaron a caerles encima. Entonces las tropas aceleraron poniéndose los jinetes a su velocidad máxima, separándose las líneas, mientras que los infantes corrían tras la primera línea, los arqueros comenzaron a disparar sobre las murallas mientras avanzaban a un ritmo regular. La infantería corría tras los jinetes separándose de la línea de Arqueros ya aumentando a su vez la distancia con respecto a los jinetes, lo que en teoría dificultaría la decisión de los defensores sobre quienes disparar…

El General Bursoss sonrió irónico al ver el ataque Warxos, la táctica era efectivamente sangrienta para ellos, pero no menos eficaz, en cuestión de medio minuto tenía tres posibles objetivos distanciados unos de otros que llegarían a los muros de forma inevitable, y de no ser por la superioridad tecnológica, de contar solo con las mismas armas que los atacantes, hubiesen estado en serios problemas pese a su superioridad numérica. Lo Warxos eran más fuertes, más rápidos y más grandes que cualquiera de las tres razas, por lo que el cuerpo a cuerpo les daría una ventaja decisiva, por lo que salvo en superioridad numérica sería imposible ganarles llegados a ese extremo, sin contar además con la ferocidad de los Gross. Por fortuna, eso no sería un problema, y aun en el caso de que se dejase llegar a esos jinetes a las murallas sin dispararles o hacer que volasen por los aires, las armaduras de combate y los fusiles les darían a las tropas Crux una ventaja crucial para rechazarlos sin el menor problema.

Las primeras flechas comenzaban a caer ya sobre las murallas, rebotando de forma "inofensiva" sobre las armaduras de los defensores Crux situados en ellas… No obstante, en algunos casos aislados, algún defensor se tuvo que retirar para obtener asistencia médica por el golpe del impacto de las flechas sobre partes "blandas" de su armadura. Las armaduras podían detener la perforación, pero no el golpe producido sobre ella, y la zona articular de las mismas se demostró ser vulnerable a estos, aunque por fortuna, era pura casualidad el que alguien fuese alcanzado allí, ya que el único modo era por un rebote afortunado, pero que aun así se dio.

El ataque tuvo poca historia, dejaron llegar a los jinetes al campo de minas mientras la artillería se cebaba con la infantería, dejando a los arqueros momentáneamente tranquilos. Cuando tanto jinetes como infantería estuvieron dentro del campo minado, las detonaron todas por control remoto, causando la muerte al 80% de ellos y el caos entre los supervivientes. Solo la línea de Arqueros quedo fuera de la destrucción, pero para entonces, la artillería ya se había centrado exclusivamente en ellos. Apenas un centenar de Jinetes e Infantes fueron capaces de llegar bajo las murallas, siendo recibidos por una nube de granadas de mano arrojadas desde lo alto por los defensores Crux… A lo alto de las murallas solo consiguieron llegar una docena escasa de Gross con sus jinetes, que fueron masacrados por las armas de los defensores antes de que pudiesen hacer el menor movimiento ofensivo… Si sobre los Warxos en la base de los muros usaron los proyectiles sólidos, contra los pocos que lograron auparse sobre los muros, los Crux abrieron fuego con el plasma, arrasando literalmente tanto a monturas como a jinetes…

Ni tres centenares de Warxos se salvaron, los supervivientes se retiraron a toda velocidad, no sin antes terminar con sus "provisiones"… Nuevamente los vehículos lanzallamas entraron en acción eliminando la presencia de los cuerpos de los atacantes y su "comida". El General Bursoss ordenó también la presencia de maquinaria para nivelar el terrero tras el combate y la actuación de los Tanques Lanzallamas, evitando de ese modo que quedasen ondulaciones en el terreno que pudiesen tratar de usar los Warxos en un futuro para cubrirse mientras avanzaban sobre las murallas. Tal y como se esperaba, la estación de los fríos llegó antes de que pudiesen volver a organizar algún ataque sobre cualquiera de los dos pasos…

Durante este primer año, la situación entre las tres razas comenzó a estrecharse y fortalecerse. La ausencia de tensiones serias, fue en gran parte gracias a que por un lado con las raciones militares la comida estaba asegurada, y por otro, la mejora que suponía la presencia de los Khuetrian con su tecnología comenzaba a "mostrarse". Las fortificaciones habían demostrado ser "inexpugnables", y las victorias conseguidas habían creado un estado de euforia entre las dos razas autóctonas, más acostumbradas a las malas noticias que a las buenas cuando de los Warxos se trataba. Durante este tiempo se priorizo el despliegue de tropas, la fortificación de las principales zonas de población, la creación de centros de adaptación tecnológica para Crux y Xars, y de estudio territorial local para los Khuetrian.

También sé decretó que todos los menores de las tres razas se integrasen en centros de estudios creados específicamente para ellos a modo de escuelas con el fin de garantizar su futuro tecnologico… Todos los lideres tenían muy claro que, si bien la presente generación tendría una adaptación complicada, era algo que debían de evitar a toda costa a la próxima, esta tenía que ser formada desde un principio para que al llegar a la edad adulta fueran capaces de moverse con los conocimientos de los tres pueblos combinados. Posiblemente fuese el primer ciclo, o año, en que los Crux y los Xars no tenían que lamentar ninguna baja en sus pueblos, ya que ni cazadores habían atravesado las montañas, posiblemente por el hecho de que pensasen establecer un puesto avanzado en la meseta. Esto evidentemente era algo que los lideres sabían que cambiaría en un futuro próximo, en cuanto los Warxos se diesen cuenta de que los pasos les estaban vedados a sus ejércitos, los cazadores volverían de nuevo…

La siguiente estación cálida comenzó como se esperaba, con un potente ejercito Warxos entrando en el paso de Darvore. 40.000 jinetes de Gross, 250.000 Guerreros a pie, y tras ellos al menos 30 piezas de artillería de gran calibre, del tipo que los Khuetrian denominaban como Bombardas, y que ellos usaban para disparar bolas explosivas sobre las fortificaciones con el fin de terminar con el mayor número de defensores posibles. El alcance útil estimado de estas piezas era de mil, a mil cien metros de distancia, su precisión no llegaría a más de 800, por lo que tenían un serio problema con ellas. Sus opciones eran malas, o las acercaban para acertar con seguridad, lo que las pondría dentro del alcance de nuestra artillería, o bien, las mantenían fuera de esa supuesta distancia, lo que haría que no tuviesen precisión ninguna. Eso indicaba que deseaban obtener las fortificaciones intactas, de tratarse del otro tipo de Artillería, la denominada como Rompemurallas, cuyo alcance eficaz se estimaba en unos mil doscientos metros y el máximo de mil quinientos, hubiese sido posible que en ese mismo año los Warxos rompiesen su "tradición" ofensiva, al verse obligados a mostrar el verdadero alcance de la artillería para defenderse.

Nuevamente se estrellaron contra las fortificaciones, solo que esta vez, el General Bursoss estableció el disparo por secciones de las 3/5 partes de la artillería de campaña de la Brigada, y reforzo la presencia en los muros de los Defensores Crux con tropas Khuetrian… Otra vez apenas unos pocos centenares de Guerreros consiguieron escapar de la masacre, también el general Warxos cometió un error importante, ya que su artillería, al situarla dentro de su alcance efectivo fue destruida casi de inmediato sin darle apenas tiempo a disparar la primera andanada. Usando lanzaderas de asalto, el General N'ralls dispuso que en las faldas de las montañas por el lado Warxos se mostrasen los restos de campamentos de "supuestos" observadores de los Protectores Crux que fuesen "fácilmente" localizables para los Guerreros Warxos al reconocer el terreno tras su nueva derrota. Si sus datos e información de inteligencia eran correctos, el modo de pensar Warxos tras la batalla y encontrar los campamentos de "espías" enemigos seria obvio. Los Warxos gracias a las constantes capturas de presas Cruxars, tenían un conocimiento bastante aproximado del número real de fuerzas de los Protectores Crux, por eso, por lógica, deberían de llegar a la conclusión de que el incremento de la defensa en el paso de Darvore indicaría que esas tropas por fuerza debían de haber sido sacadas de las fortificaciones del paso de Tolgax, por lo que esta habría estado en esos instantes prácticamente desguarnecido.

Contra lo que se esperaba, un segundo ataque coordinado al final de la temporada en ambos pasos, fue algo que no ocurrió. Alguno de los Clanes vecinos al de los ocupantes de la salida del paso en su territorio, había debido de pensar que, tras sus derrotas y perdida de tropas, estos se habían debilitado, por lo que les atacaron. Las misiones de observación de los T2 sobre territorio Warxos mostró la virulencia de los combates que se estaban desarrollando entre sus facciones y mostraron una vez más, la rigidez de su forma de combatir. A finales de la temporada fría, la guerra había llegado a su conclusión con la victoria del Clan que ocupaba la entrada al paso, en esta habían perecido casi un millón y medio de guerreros por cada bando… Puede parecer mucho, pero dada la abundante descendencia que cada hembra Warxos podía tener en cada parto, entre 6 y 10 crías por año, estas pérdidas no eran ciertamente significativas dentro de su población global… De hecho, de no ser por sus constantes guerras su población haría mucho tiempo que habría saturado por completo el planeta, si se mostraba "contenida" era precisamente gracias a ellas.

En ese segundo ciclo que se les concedió de paz a la meseta, se terminaron las fortificaciones de casi todas las poblaciones, el adiestramiento de estas en caso de presencia Warxos detectada en el sector, el establecimiento de guarniciones militares, y se comenzó con la construcción de infraestructuras de comunicaciones viales previo al desarrollo del resto de equipamientos necesarios para aumentar el nivel tecnológico de las tres razas. Además, se establecieron fortificaciones militares estratégicamente para que las tropas pudiesen patrullar entre las ciudades de las tres razas, dando de este modo una garantía de seguridad con su presencia a la población civil, algo que se mostró decisivo para la seguridad tras que dichas fuerzas interceptasen y masacrasen a varios grupos de cazadores Warxos que habían logrado "penetrar" profundamente en la meseta. Este segundo ciclo anual quedó también marcado por la presencia continua, a tres por mes de gigantescos cargueros de la Confederación Imperial que desembarcaban mineral aleado de máxima calidad y partían de nuevo llevándose la "escoria" que rodeaba las antiguas minas, y que en su mayor parte estaba compuesto del valiosísimo Elemento Z, necesario para la construcción de las maquinas creadoras de Agujeros de Gusano.

Un problema en Cruxars en especial, era la profundidad a la que normalmente estaban las vetas de mineral de hierro de calidad. Casi todas ellas con la tecnología de los nativos, quedaban fuera de su alcance, y los Khuetrian, en esos momentos no podían permitirse el poner ninguna explotación en marcha, ya que distraería recursos vitales muy necesarios en esos momentos. Tampoco el disponer de las grandes fundiciones necesarias para poder alear el acero de alta calidad. Por ese motivo, su Alteza Imperial, fue quien propuso que los cargueros pesados que se llevasen el elemento Z, en un principio llegasen al planeta cargados con mineral ya aleado refinado de máxima calidad que tan necesario les iba a ser hasta que pudiesen disponer de todo lo necesario por si mismos en marcha, y posteriormente con aleaciones de alta resistencia que no existían en el planeta… Pese a lo que pueda parecer, ese mineral inicial, al estar refinado con una pureza cercana al 100% por la alta tecnología de la Confederación Imperial, equivalía a la producción de al menos tres o cuatro años de producción máxima de cualquier "industria" que pudiesen poner en marcha en esos momentos.

Obviamente, tras la finalización de la guerra entre los clanes Warxos, nuevamente su atención se centró en los pasos que conducían a la meseta. Tal y como se esperaba, dedujeron que su anterior derrota se debió a la presencia de la casi totalidad de los Defensores Crux durante la batalla, por lo que el otro paso, habría estado prácticamente desprotegido. La recién terminada guerra trajo una ventaja inesperada para los defensores de la meseta, cada paso terminaba en territorio de un diferente Clan Warxos, y entre estos se habían creado tensiones. El Clan del territorio del Paso de Tolgax había apoyado a uno de los Clanes atacantes con material, lo que no gusto nada al Clan del paso de Darvore. Por esto se estimó que un posible ataque combinado era poco probable, al menos a corto plazo, mientras no se hubiesen agotado todas sus demás opciones para tratar de llegar a los "recursos" de población Crux y Xars. Todos en la meseta eran conscientes de que los pasos daban a ambos Clanes una superioridad económica sobre el resto que no se podían permitir perder durante mucho más tiempo, gracias a las capturas Crux y Xars, por lo que antes o después terminarían colaborando. Pero de momento, esta animadversión entre ellos parecía ofrecerles un respiro.


CONTINUARA


*Serlem – Rango equiparable al de comandante, teniente coronel o coronel, su percepción de rango se alteraba según la experiencia del Serlem…

*Gross – Reptiles de 5 a 6 metros de largo y 2M de alzada, cuyas garras son capaces de perforar la piedra para trepar por los muros incluso con sus jinetes encima. Son carnívoros, y los Gross usados de monturas de guerra están entrenados para atacar a los enemigos de sus jinetes e incluso devorarlos.

3 comentarios:

  1. Amigo te sigo desde hace más de 10 años, de hecho antes de que me bloquearan el acceso a todorelatos, pude copiar todos los libros de vhaalzord, y de vez en cuando los leo.
    Esta historia está muy buena, ojalá puedas seguir escribiendola.
    Saludos desde Cuba

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  2. Siempre interesante tus relatos mis felicitaciones

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  3. Estupendo este libro espero con impaciencia su culminación

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