viernes, 12 de mayo de 2017

                        Confederación Imperial Galáctica

Libro - 8

Hiperbórea


 5



Fecha estelar - 5332
6º Cuadrante Militar del Imperio
Sistema Codificado CIG-9845
Zona externa del sistema
Nave de Guerra "Represor"


Su Alteza Imperial el Príncipe Jhored, estaba siguiendo atentamente la situación dentro del sistema estelar hiperbórea, especialmente desde el instante en que el Vicealmirante Tagard se había unido a su flotilla con las escoltas del convoy que había desplegado a los “Cazadores de Hiperbórea” en la superficie del planeta, junto a gran cantidad de medios defensivos para las divisiones planetarias del mismo. Así mismo, la torpedera Z-249 se encontraba en una posición resguardada en los bordes de dicho sistema, con órdenes estrictas de no intervenir pasase lo que pasase sin una orden expresa de su Alteza Imperial. Su misión exclusiva consistía en escanear constantemente la situación del sistema e informar mediante microondas de banda estrecha al Represor.


En un momento dado, la Z-249 informo de que uno de los cargueros parecía tener problemas con sus motores de Impulso y se estaba retrasando con respecto al resto de la Flota de refuerzo del condominio. Haciendo un rápido cálculo, su Alteza dio órdenes específicas a la Torpedera Z-249 de moverse de inmediato y a toda velocidad hacia el sistema estelar fronterizo codificado LML-2985, donde debería de mantenerse oculta a la espera de la posible aparición de cualquiera de las naves supervivientes de la Flota que actualmente se dirigía a hiperbórea. Entre sus órdenes, su capitán se encontró con una un poco extraña para su juicio aunque perfectamente especificada, debía de destruir cualquier nave que apareciese, pero dándole el tiempo necesario como para ser capaz de emitir un mensaje de “alerta”…
Tras dar las órdenes a la Torpedera, su Alteza Imperial se dirigió al puente de mando del Intrépido, nada más entrar ocupo el asiento del Observador, situado junto al de la Almirante, un par de metros por detrás de la butaca del Capitán del Represor, dando órdenes a la Almirante Kasinhs de poner en marcha la Flota y saltar hacia el Sistema Hiperbórea en cuanto todo estuviese listo… La Almirante dio la orden de despliegue y de salto para toda la flota, luego, antes de dirigirse a su Alteza puso en marcha un campo aislante para que nadie pudiese escuchar la conversación…
·         ¿Seguro?, ese grupo de transporte, tropas terrestres aparte, tan solo va acompañado de 2 Cruceros Pesados y 10 Destructores… Creí que tendríamos que enfrentarnos a mas naves
·         Se contemplaba que tratasen de ampliar la brecha en nuestro territorio atacando los sectores adyacentes al Hiperbóreo, y para ello se necesitaría la presencia de unidades pesadas… -replico su Alteza, siendo interrumpido por la Almirante.
·         Por eso lo digo Alteza, esas unidades pesadas aún no han llegado, creo que este movimiento es prematuro…
·         En realidad, yo contemplaba dos posibilidades, la primera seria esa.
·         ¿Y la segunda?
·         La segunda es esta –replicó disponiendo de un diagrama tridimensional del cuadrante, en donde se podía apreciar la estimación de movimientos por parte de las naves del Dominio, o Principado Zordek, como se le prefiriese llamar.
·         Entiendo –replicó la Almirante tras ver toda la simulación-. Usarían estas pocas unidades como distracción en operaciones de “piratería”, obligándonos a concentrar recursos en la zona, mientras que su flota, realmente estaría ocupando territorio perteneciente al Trono Imperial de la Liga de Mundos, ampliando de ese modo el poder del Dominio dentro de la Liga y forzando a las principales casas nobles a dar un paso adelante mostrando públicamente su cara.
·         Eso es precisamente, por eso además el movimiento de naves de guerra del Dominio aquí será mínima, así podrá usar plenamente la potencia defensiva del Sector. Para poder recuperar Hiperbórea, Zordek inteligentemente nos deja dos únicas vías posibles, la Diplomática o la Militar. La primera, aun devolví, pero para ello debe de contener los daños que nos cause. La segunda, supondría que deberíamos de atacar por sus flancos, invadiendo de facto en el proceso el territorio de la Liga de Mundos Libres, desatando de ese modo una guerra generalizada de la cual saldrá beneficiado aun en caso de que nosotros consiguiésemos recuperar Hiperbórea. Antes de poder tocarlo, deberíamos de quitar de en medio a gran parte de sus enemigos, cuyos territorios están entre el, y nosotros.
·         Pero en la actual situación, con el Emperador Sigfried IV desaparecido junto con los dos candidatos a sucederlo, ellos estarían divididos, lo que a nivel estratégico nos otorgaría una ventaja muy importante. No entiendo del todo en que beneficiaria esto al Príncipe Zordek, aunque negociase y se saliese con la suya, ni aun así podría hacerse con el Trono Imperial, y muchísimo menos mantenerlo después, ni aunque destruyamos nosotros antes las flotas de sus principales adversarios.
·         Y nuevamente Almirante, al igual que muchos otros, consideras al Príncipe Zordek como alguien con unas miras tan estrechas que es peligroso. Gane o pierda aquí, él no ocuparía el Trono, pero se encargaría de que alguien afín y al que pueda manejar lo haga. Con el emperador bajo su control, solo sería cuestión de cuánto tiempo tardaría en ocupar por sí mismo el Trono, o bien, buscarse otro propio por su cuenta en algún sitio aledaño aprovechándose del poder de la Liga para ello.
·         La Confederación Imperial, es lo que realmente está buscando… -abrió mucho los ojos la Almirante, visiblemente sorprendida por sus propias conclusiones.
·         ¿Probablemente?, sí, justo eso mismo, pero a muy largo plazo, un plazo excesivo para un asunto de esa índole.
·         Entiendo que esa situación no llegaría a darse… -dijo la Almirante, obteniendo únicamente una irónica mirada del Príncipe, que para ella fue la mejor respuesta posible.
·         Tanya, ahora mismo Zordek tan solo busca prestigio propio y poder colocar un títere en el Trono de la Liga de Mundos Libres, que es en lo que debemos centrarnos. En estos instantes, es débil, se mantiene al frente del Dominio Zordek a nivel interno por medio del miedo, y en especial el que la población le tiene a la Tarharsa, la cual ahora mismo ya está prácticamente aniquilada. En cuanto acabemos con esta Flotilla de refuerzo, tendremos vía libre a su propio territorio, cuya frontera con nosotros si no me equivoco, estará prácticamente desguarnecida al desplazar sus tropas para ocupar territorio Imperial de la Liga.
·         Claro, y usted ha decidido obviar esta posibilidad durante todo este tiempo, ¿Por qué…? –entonces abrió los ojos como platos-. Piensa moverse al Dominio, piensa entrar a territorio enemigo con esta Flota…
·         Por supuesto que sí, con esta y con el resto de naves que se nos unirán, en cuando de orden de inicio de la fase tres de esta… “pequeña charada”… que estamos llevando a cabo.
·         ¿Cómo dice?
·         Ya lo vera Tanya, ya lo vera… a su debido tiempo. Ahora, vamos a ver qué podemos hacer cuando lleguemos con esas naves…
Como ya se explicó, ninguna de las naves de la Flota de Refuerzo sobrevivió al encuentro con las defensas de Hiperbórea y con la Flota del Represor. Su Alteza, una vez que el último carguero fue destruido, ordeno que la Flota se concentrase y desplegase nuevamente en orden de batalla antes de saltar a su siguiente destino, el planeta Capital del Dominio Zordek. Ni que decir tiene, que la idea no le gusto a nadie, por considerarla como excesivamente arriesgada. Lo que su Alteza no tuvo a bien explicar, es que en esos instantes ya había puesto en marcha la siguiente fase del Plan, y en este caso, se trataba de cierto mensaje codificado dirigido a una nave de la Confederación, que se encontraba bastante dentro del espacio de la Liga de Mundos Libres, la UEP Estrella Oscura, al mando del Almirante Stratos.
Por su parte en esos mismos instantes, el Almirante Stratos intentaba descifrar que narices era lo que estaba pasando, acababa de recibir sus órdenes en dos mensajes codificados consecutivos, y desde luego no era nada que se hubiese podido esperar, dadas las capacidades y situación actual de la Estrella Oscura. Su Alteza Imperial le ordenaba exclusivamente, integrar cierto mensaje en tres Misiles Blancos, y enviar estos en una rápida sucesión cerrada hacia el interior de la Nébula Tarkhana, para posteriormente tan solo “esperar acontecimientos”. Al final del primer mensaje, venían dos anexos, el primero le indicaba que no se molestase en pedir confirmación ninguna de sus órdenes, y en el segundo, que tan solo podía desbloquear la siguiente comunicación en caso de que a su entender sucediese algo lo “suficientemente anómalo” como para necesitar posteriores instrucciones. El Almirante transmitió sus órdenes al puente de mando mascando las palabras y por su tono de voz, más que evidentemente cabreado, lo que hizo que nadie osase molestarse con preguntas “innecesarias”. El Almirante Stratos tardo exactamente cinco horas y once minutos en desbloquear a toda velocidad la segunda tanda de órdenes que había recibido.
Para su más absoluta y completa sorpresa, tan solo unos pocos minutos antes, no llegaban ni a dos, en el mismo sistema estelar en que se encontraba la UEP, acababa de hacer su aparición una poderosa Flota de la Liga de Mundos Libres procedente de la Nébula Tarkhana… 9 Acorazados, 19 Cruceros de Batalla, 27 Cruceros Pesados, 24 Cruceros Ligeros, 47 Destructores y 15 Fragatas escoltando al Acorazado “Alianza de los Mundos”, nave insignia del Emperador de la Liga Sigfried IV. Y por si fuese poco, nada más salir de las interferencias de la nébula, el Acorazado Insignia de la Liga había emitido un mensaje diplomático codificado dirigido a la Confederación Imperial y que dado su nivel de acceso de seguridad no había tenido el mas mínimo problema para leer… El mensaje básicamente hacía referencia a dos cosas, la primera una supuesta alianza entre ambos Tronos Imperiales, y la segunda, la petición de que la Flota de la Confederación Imperial atravesase la frontera común con el fin de prestar apoyo para el restablecimiento de la legalidad dentro de la Liga. Lo que Stratos encontró en el segundo bloque de órdenes que le llegó, y que tan solo en esos momentos se había visto con autoridad para abrir, le hicieron maldecir en todos los idiomas que conocía, nuevamente había subestimado lo maquinador que podía llegar a ser el Príncipe Jhored. Su Alteza Imperial era muy claro con sus órdenes, tanto como con el anterior grupo de ellas. La UEP Estrella Oscura debería de dirigirse hacia el Sistema Capital del Dominio Zordek de inmediato sin ser detectada y esperar allí controlando el tráfico con sus sensores en lo posible hasta la llegada de la Fuerza de Combate del Represor, pero antes de ello, debía de dar órdenes a todas las Torpederas desplegadas bajo sus órdenes, de atacar cualquier Trasporte o carguero con equipo militar o tropas perteneciente al domino allá donde se los encontrasen, tratando de evitar en todo momento entrar en combate con unidades de guerra. Para todo esto disponían de Tres días, trascurridos los cuales, todas las Torpederas debían de regresar de inmediato a sus bases respectivas para integrarse nuevamente en sus mandos correspondientes.
Dichas ordenes tenían además un grupo de instrucciones muy específicas para la Estrella Oscura, la cual sin dilación, una vez el Grupo de Combate del “Represor” llegase y recibiese sus datos sobre la situación en el sistema, debía de dirigirse a toda velocidad hacia un insignificante sistema estelar de la Liga de Mundos Libres, el sistema Alarat, cuyo segundo planeta era un gigante gaseoso, en la atmosfera del cual debía de esperar emboscado a que su presa hiciese su aparición. Las instrucciones de qué y cómo hacerlo también eran extremadamente concisas y claras, nuevamente el Almirante Stratos se encontró pensando en qué demonios podía llegar a pasar por la cabeza de su Alteza Imperial para dar por supuestas tantas cosas que podían torcerse a nada que ocurriese algún imprevisto… Las órdenes daban una fecha específica hasta la que debía de esperar allí, excepto que determinada nave en concreto fuese destruida en algún enfrentamiento, en cuyo caso recibiría instrucciones para retornar a máxima velocidad posible a Mar-Shagan donde debería de continuar de inmediato con el “otro proyecto”. Si no hubiese sido por el hecho de que las órdenes procedían directamente de su Alteza Imperial, y que este ya había demostrado sobradamente, que locura o no, sabía perfectamente lo que se hacía, lo habría mandado todo a freír puñetas y comenzado a actuar por su cuenta. Stratos comenzó a impartir las órdenes que se le pedían y a organizar la preparación de la Estrella Oscura para aquello que casi, casi, de venir de otra persona consideraría como una ingenuidad esperar que ocurriese.
Para ese momento, cuando el Emperador Sigfried IV hizo su reaparición al frente de una potente Flotilla de naves de guerra, la situación en la Liga de Mundos Libres prácticamente ya se había comenzado a descontrolar. Ante la embestida sobre territorios Imperiales por parte del Príncipe Zordek, las dos principales facciones con aspiraciones al Trono dieron un paso adelante aun sin contar aún con suficientes apoyos como para poder sentarse en él por sus propios medios. Desgraciadamente para todos ellos, la repentina reaparición del Emperador les acababa de dejar en una posición potencialmente desastrosa, pero sobretodo muy vulnerable, pues sino abiertamente, sí que tácitamente estaban tratando de usurpar el poder del Emperador, cuando está aún seguía con vida. Después de mandar la petición de asistencia y ayuda a la Confederación Imperial, el Emperador Sigfried IV de forma clara y abierta ordeno la detención de aquellos que más “asomaron la cabeza”, notificando además contar con el apoyo de su Aliado, la Confederación Imperial Galáctica. El siguiente aldabonazo que recibió el Príncipe Zordek y los otros dos “sublevados”, fue el hecho de que las primeras naves de Guerra de la Confederación Imperial que se adentraron en territorio de la Liga tras la petición de apoyo del Emperador Sigfried IV fuesen las del Grupo de Combate del Represor, con esta a su cabeza, y al frente de ella el mismísimo Príncipe Heredero, Jhored Thalant. Si el comunicado del Emperador le hubiese podido parecer a cualquiera de sus enemigos o de los indecisos de que partido tomar, como un farol, este hecho concreto acababa de dejar muy clara la verdad.
En la Liga las grandes casas tenían derecho a poseer sus propias naves de Guerra, aunque la defensa del Imperio dependía casi en exclusiva de la Flota Imperial, en muchos casos esas naves eran un serio problema, pues según de que familias o territorios se tratasen, eran relativamente poderosas y dignas de ser tomadas en cuenta. Uno de estos territorios era el Dominio Zordek, el cual cuando la Flota del Represor hizo su aparición en su sistema capital, tenía sus efectivos desperdigados y fuera de situación en ataques a los territorios imperiales fronterizos. Para empeorar la situación, en dichos territorios, donde anteriormente se podía ver un cierto grado de indecisión sobre qué hacer, tras la aparición del Emperador al mando de una potente Flota, había terminado en violentos combates allí donde las tropas de Zordek habian tomado contacto con los defensores Imperiales. La presencia repentina del Represor, nave insignia del heredero al Trono de la Confederación Imperial, frente a una Flota de Guerra en el sistema capital de Zordek como respuesta a la petición del Emperador de la Liga, había espoleado aún más su decisión de combatir y resistir. En los tres siguientes días a la aparición del Emperador Sigfried IV, y antes de regresar a sus bases, las Torpederas de la Confederación Imperial habían conseguido destruir una docena de transportes de tropas y aproximadamente unos cuarenta cargueros encargados de distribuir material de guerra a los puestos de combate más avanzados del Dominio Zordek. Además, en esos tres días, la Flotilla del represor se aprovechó de un error de novatos ejecutado por el estado mayor del Dominio, al reclamar refuerzos para librar al sistema capital del sitio sin organizar nada antes de que se pudiese poner el Sistema completo bajo interdicción total de comunicaciones. Por otro lado, tan solo un día después de la entrada en el sistema de la Flota del Represor, a esta como precaución ante los previsibles combates que se llevarían acabo, y por orden expresa del Príncipe Jhored, se les unieron dos *Naves de Apoyo de la Flota.
Al día siguiente los primeros refuerzos del Dominio hicieron su aparición en el Sistema Capital del mismo. Dos Cruceros de Batalla, tres Cruceros Pesados, Seis Cruceros Ligeros y Ocho Destructores se fueron a dar prácticamente de bruces con la Flota del Represor, al que se sumaban 4 Acorazados, 8 Cruceros de Batalla, 13 Cruceros Pesados, 15 Cruceros Ligeros, 24 Destructores, 9 Fragatas, 2 Corbetas de Exploración y las 2 recién llegadas Naves de Apoyo de la Flota, las cuales estuvieron durante todo el combate protegidas por las 9 Fragatas. Es obvio decir que las naves pesadas del dominio no tuvieron la menor oportunidad contra el Represor y los Cuatro Acorazados, y el resto, las escoltas, se vieron ampliamente superadas en número por sus iguales, pese a ello, no se llegaron tampoco a enfrentar a ellas. Mientras que el Represor y tres de los Acorazados se entretenían machacando a los dos Cruceros de Batalla Adversarios, el Vicealmirante Tagard frente a sus Cuatro Cruceros de Batalla y con el apoyo de diez de los cruceros pesados se encargó de terminar eficazmente con todas las escoltas adversarias, los Cruceros Ligeros y Destructores enemigos fueron impotentes ante las naves de la Confederación. Por su parte, los Tres Cruceros Pesados restantes del dominio se tuvieron que enfrentar al Acorazado del Vicealmirante Verser apoyado por los cuatro Cruceros de Batalla restantes de la Flota, terminado con ellos rápida y despiadadamente. La Almirante Kasinhs desplego los restantes 3 Cruceros Pesados, 15 Cruceros Ligeros y 24 Destructores de la Flota de modo que cubriesen cualquier intento de huida de naves enemigas del sistema, con órdenes expresas de frenarlos lo suficiente como para dar tiempo a los Acorazados y Cruceros de Batalla de ocuparse de ello. Varias naves sufrieron impactos, con resultado de desperfectos leves que fueron rápidamente solucionados por sus propias tripulaciones y muy especialmente por la presencia de las dos Enormes Factorías que en realidad eran las Naves de Apoyo.
Al tercer día de la presencia de la Flota en el sistema llego el segundo y último grupo de ayuda que trataría de liberar el sistema Capital del Condominio de la presencia de sus atacantes. Desgraciadamente, el intento aun resulto muchísimo peor que el anterior, gracias a la fragmentación de la llegada de los refuerzos. La primera llegada fue protagonizada por dos de los Acorazados de que se sabía que disponía el Dominio con una escolta de Destructores, un total de siete de estos. Su entrada fue más de lo mismo, algo totalmente previsible al tratar de salir al espacio normal en una zona muy determinada, lo bastante próxima al Planeta como para obtener rápidamente una posición en la que contar con la protección de las defensas  Planetarias. Desgraciadamente esta distancia a los efectos de gravitación planetaria tiene unos límites mínimos en los que es imposible salir del Interespacio. Los dos Acorazados y los siete destructores fueron rápidamente suprimidos por el Represor, los Cuatro Acorazados y los Ocho Cruceros de Batalla del Grupo de combate situados en formación de muro, enviando una autentica cortina de fuego según fueron apareciendo desde el Interespacio. Aún estaban estos recuperando sus posiciones anteriores cuando hizo su aparición un segundo grupo de batalla… Ocho Cruceros pesados, cuatro Cruceros Ligeros y cinco Fragatas… que duraron aún menos que los anteriores Acorazados. Finalmente alcanzo el sistema el último grupo de naves, solo que en esta ocasión, su comandante estimo un riesgo excesivamente elevado su aparición excesivamente cerca del mundo habitado por su falta de maniobrabilidad. 5 Cruceros de Batalla, 2 Cruceros Pesados, 13 Cruceros Ligeros, 23 Destructores y una corbeta de exploración aparecieron dentro del sistema, pero a suficiente distancia como para ver lo que tenían enfrente y poder maniobrar en consecuencia con tiempo más que de sobra.
El oficial al mando de la flota del Dominio fue lo bastante inteligente como para determinar lo inútil de intentar forzar una retirada de la Flota de la Confederación Imperial, ya que la potencia de esta era muy superior a la suya, por lo que ordeno de inmediato la retirada del sistema. La Almirante Kasinhs al ver como la Flota enemiga comenzaba a virar con clara intención de retirarse no hizo el menor gesto o intento siquiera de dar orden de perseguirlos, consciente de que nunca llegarían a tiempo para impedirlo. Las noticias que para entonces iban llegando a la Flota eran de lo más positivas, la Flota del Emperador Sigfried IV había aumentado considerablemente en efectivos a medida que avanzaba hacia la capital de la Liga, hasta casi triplicar el número inicial de efectivos. Por otra parte, tres potentes Flotillas de la Confederación Imperial compuestas cada una de ellas por de 15 a 17 Acorazados, 18 a 21 Cruceros de Batalla, 30 a 36 Cruceros Pesados, 26 a 33 Cruceros Ligeros, 51 a 60 Destructores y 4 a 5 Corbetas de Exploración de la Flota por grupo, lo que supuso un durísimo revés para todos aquellos que se habían movido antes de tiempo en su afán por alcanzar el trono. En una medida tan sorprendente como inteligente, el Emperador Sigfried IV hizo llegar a las naves del Dominio Zordek la oferta de un indulto general para sus vidas a cambio de la entrega en una bandeja de plata del Príncipe Zordek, vivo o muerto. Con la Tarharsa completamente aniquilada, con el mundo Capital del Dominio sitiado y bajo interdicción por parte de las Fuerzas de la Confederación Imperial, con una buena porción de su flamante Flota destruida por esas mismas fuerzas, con todo su plan desmoronándose, el golpe de gracia a sus aspiraciones fue la rebelión de la mayor parte de las naves de su flota que exigieron su rendición inmediata. Si bien el Príncipe Zordek logró escapar de la emboscada con su Crucero de Batalla personal, el Tarharsa y otros tres Cruceros Ligeros que se mantuvieron leales a su causa, este era plenamente consciente de estar completamente acabado.
Probablemente, el Príncipe Zordek tuviese también sus planes hechos para la eventualidad de que en un momento dado pudiese ser derrocado del Dominio por el Emperador de la Liga, pero nunca se podrá saber en qué consistían dichos planes, pues tan solo tres saltos de sistema más allá de donde fue emboscado, el pequeño grupo encontró la muerte, una muerte gloriosa en forma de brillante Estrella. Tras realizar el tercer salto, al llegar al sistema deshabitado Alerat, la pequeña flotilla se dirigió rápidamente a buscar la protección del segundo planeta, un gigante gaseoso cuya atmosfera podría ocultarles de cualquier nave que entrase en el sistema tras ellos. La cuatro naves avanzaban a toda velocidad en una formación cerrada hacia el planeta, cuando apenas se encontraban a mil quinientos kilómetros de distancia de la Hexosfera del mundo, del interior de este surgieron dos grandes misiles que se dirigieron directamente contra el pequeño grupo de combate, el cual realizo la maniobra más previsible en este caso, abrirse levemente para dejarles pasar por entre medias. Parecían misiles balísticos defensivos de origen desconocido, por lo que el dejarles pasar no ofrecía el menor problema, ni aun en el poco probable caso de que fueran armas termonucleares y detonasen. Los escudos de las cuatro naves podrían manejarlo perfectamente.  Sin embargo, cuando los misiles se encontraron a menos de tres kilómetros de las naves del grupo, detonaron sus poderosas cabezas de Antimateria, creando dos pequeñas estrellas dentro del sistema, que convirtieron literalmente en polvo el Crucero de Batalla “Tarharsa” y los tres Cruceros Ligeros que le acompañaban. Una hora después de que los dos pequeños soles se apagasen, de la atmosfera del planeta surgió rauda la UEP Estrella Oscura con rumbo directo hacia su base de operaciones en el Sistema Belal.

EPILOGO
Las naves de la Confederación Imperial no llegaron a entrar en combate en ninguna parte fuera del Dominio, se terminaron retirando del Territorio de la Liga unos días después sin haber realizado un solo disparo. Otro asunto fue el grupo de combate del Represor, el cual no abandono el sistema capital del Dominio Zordek hasta la llegada del mismísimo Emperador Sigfried IV con una importante flota a sus espaldas. Por lo que se supo más adelante, sus dos primos murieron en un trágico accidente durante su periodo de estancia en la nébula, así como allí también tuvo lugar el nacimiento de su tercer hijo y futuro heredero al Trono. Tanto el niño como la madre, estaban rodeados de un fuerte dispositivo de seguridad, compuesto en exclusiva por personas específicamente leales a su esposa y a su heredero, era del todo obvio que el Emperador Sigfried IV no iba a volver a tolerar “nuevos” accidentes estúpidos contra su vástago. Lo que aparentemente para cualquiera hubiese podido verse como una situación de lo más tensa, en realidad fue todo lo contrario, para asombro de propios y extraños, aunque realmente no del todo para su núcleo más cercano. Fue su Alteza Imperial el Príncipe Jhored quien se desplazó junto a su esposa y una sola guardaespaldas, Selena evidentemente, en una lanzadera a entrevistarse en persona con su Majestad Imperial Sigfried IV a bordo de la nave Insignia de este. De lo que allí se tratase o dejase de tratar, se hablase o dejase de hablar, solo se podría especular, pues durante el encuentro únicamente estuvieron presentes ambos matrimonios, Selena y dos de los guardaespaldas personales del Emperador Sigfried.
La más que visible “concordia” entre la Confederación Imperial y la Liga supuso un auténtico maremágnum político a lo largo de todas las fronteras de ambos estados, y fue visto con especial preocupación e interés, en la Capital de la Mancomunidad Federada de Vega. Por su parte, el Príncipe Jhored estaba especialmente satisfecho de cómo se había desarrollado todo lo sucedido, acababa de asegurar de forma estable una de sus fronteras, y si nada se torcía ya estaba a tan solo dos años de poder terminar con la planificación del desarrollo del poder militar de la Confederación Imperial Galáctica dentro del sector. Jhored se encontraba en su despacho personal con la mente viajando por sus planes, irónica y paradójicamente, analizándose a sí mismo, se encontró con una gran similitud entre él y el difunto Príncipe Zordek, ambos planificaban sus movimientos en base a objetivos estrictamente limitados, no pasando al siguiente hasta haber conseguido el anterior. Zordek, a su modo de ver había cometido un error crucial durante todo este problema, se había movido hacia su siguiente objetivo antes de verificar que había conseguido lo que quería en Hiperbórea, lo que a la postre le resultó fatal. Jhored no pensaba cometer un error de ese calibre, primero pensaba terminar con la total consolidación militar de la Confederación, y únicamente entonces, tan solo después, pasaría a su siguiente objetivo, el despegue económico progresivo de la Confederación Imperial con respecto a sus vecinos...
Por otro lado, el SISI hizo una magnifica investigación sobre cómo fue posible que, gustase o no en realidad, fuese un enemigo desde su propio territorio quien ordenase el despliegue de tropas Terrestres de la Confederación Imperial a su antojo, dejando además el resto de fuerzas completamente colgado, desconcertado y sin ordenes prácticas que poder llevar a cabo. La poco sutil presencia de la Corbeta Caronte, y el hecho de que los altos estamentos supiesen perfectamente a que se dedicaba y donde estaba realmente destinada dicha nave, hizo que las bocas, generalmente muy “cerradas”, se abriesen a la mínima pregunta que el SISI, o la temida Guadaña, como se prefiera, le hiciese. Si bien el asunto fue completamente tapado y modificado el modo en que funcionaba la cadena de mando dentro de los diferentes estados mayores, La persona directamente responsable de dar la orden de despliegue, un general de apoyo del Alto estado mayor del Ejército, no se fue de rositas. Tras su “colaboración” involuntaria con el enemigo, al escuchar a quien no debía y transmitir órdenes que nunca debió de dar, fue degradado y trasladado a un solitario puesto fronterizo de observación en el 3º Cuadrante Militar, en plena Frontera con los Razors, en lugar del soñado ascenso que esperaba cuando tomo la unilateral decisión de saltarse a todo el escalafón superior por considerarse más listo. El motivo de tapar todo el asunto, no fue por las consecuencias políticas del mismo, como muchos en el Alto mando creyeron, sino, porque tal y como su misma Alteza Imperial recordó al SISI cuando se opuso a ello y al hecho de que al menos una veintena de diversos mandos no terminasen en sus prisiones de Hibernia o Infierno, ese mismo plan que se empleó contra la Confederación Imperial, debidamente modificado a cada particularidad compleja, podría ser perfectamente susceptible de usarse contra ciertas deficiencias existentes en otros “estados mayores” ajenos…  Sin duda, un arma más que poderosa si era adecuadamente usada y en el momento preciso.
Por otro lado, por fin la burocracia de Defensa completo la asignación del proyecto ideado por su Alteza Imperial, y por el cual Tagard ya podía por fin usar su Estrella de Almirante en su uniforme. La idea era muy simple, dado que Mar-Shagan no podía tener “Flota” asignada, y la burocracia parecía ser el único constante, su Alteza Imperial había decidido no luchar, sino unirse a ellos, creando un nuevo departamento, “El departamento para el Control de la Reserva de la Flota”, cuyas oficinas estarían ubicadas en la Base central de la Reserva de Mar-Shagan y de quien dependerían todas las demás Bases-Deposito de la Confederación Imperial, cuyo director seria el Almirante Carl Stratos. Mientras que el General de cuatro Estrellas Michael Leborgne ocuparía el puesto de Comandante de la Base de Mar-Shagan, el Flamante Almirante Tagard, sería el principal Inspector Volante de la Inspección de la Reserva con una asignación adecuada de naves bajo su mando para llevar a cabo su cometido. Por otra parte y dado los últimos incrementos presupuestarios destinados a operaciones “negras”, de este modo su Alteza pensaba de paso ahogar en un auténtico océano de papeleo burocrático todo lo referente a “presupuestos sensibles” dentro de la Base-Deposito. Por otro lado, la presencia de la Oficina Central de Inspección de la Reserva, iba a permitir en un momento dado, que Mar-Shagan, pudiese tener asignada, sino una Flota completa, si cierta cantidad de naves “diversas” en número indeterminado para poder realizar su “trabajo”.

FIN



*Naves de Apoyo de la Flota: En realidad son enormes Naves Factoría capaces de construir prácticamente cualquier parte de la estructura de una nave, incluyendo sus armas de energía o de proyectiles con sus suministros  (misiles, torpedos, proyectiles repulsores), etc., con escasas pero vitales excepciones para la supervivencia de cualquier navío de Guerra.

40 comentarios:

  1. Brillante final. Por favor, no nos hagas esperar demasiado.

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  2. No nos olvides que queremos mas de tu arte escribiendo.tu admirador.

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  3. Solo podemos agradecerte tu arte y que lo compartas con nosotros y esperar al proximo episodio de esta magnifica serie.

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  4. Excelente como de costumbre.
    Tienes fecha estimada para los proximos capitulos?

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  5. Excelente como de costumbre.
    Tienes fecha estimada para los proximos capitulos?

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    1. De momento no, ahora estoy liado con Lilim, terminando el próximo... luego me pondré otra vez con esta serie... Lo siento, pero es que de verdad, no tengo tiempo...

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  6. Excelente espera otra nueva entrega

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  7. Me gustaria saber cuando publicaras otro capitulo de la confederacion

    Muchas gracias

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    1. En cuanto pueda ponerme con la serie de nuevo, estoy un poco liado con el trabajo

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  8. Saludos desde Venezuela, toda una obra de arte, igual que las crónicas de vhald, le da un aire de la serie babilon 5 (ni idea de como se llame por alla), te recomendaría que si necesitas algo de inspiración para crear nuevas nombres de razas, naves y demás revisaras la serie mass effect (un juego de la xbox 360), que tiene un ambiente mas que similar y podriar ayudar en momentos de bloqueo

    De mas esta mandarte felicitaciones y los mejores sentimientos desde este lado del charco jejeje. Se espera con ansias el siguiente libro

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  9. Ya estoy estrañando tus historia ya pasaron 7 meses aun no da señal de vida

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  10. Ya estoy estrañando tus historia ya pasaron 7 meses aun no da señal de vida

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  11. Cuando vas a publicar otro capitulo de la confederacion

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  12. Estimado autorazo: espero que ésta larga ausencia esté justificada por la publicación de algún libro; prometo comprarlo en agradecimiento a las horas de entretenimiento que me has brindado. En otro caso, exijo, cual adicto en abstinencia, la entrega inmediata de algún material, aunque sea el borrador de un borrador, aunque sea muy corto, pero, por favor, dame algo que leer. Fa

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  13. Estimado, nos puedes contar si vas a seguir escribiendo esta fascinante historia, se espera con ansias la continuación.-

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  14. Shadow Continuaras esta historia y la de Ashur el maldito?

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  15. Continuamos esperando con ansiedad que reinicies la serie.

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  16. Shadow

    Espero te encuentres bien. Ya casi un año que no escribes que será lo que te ha quitado el tiempo de publicarnos

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  17. Estimado señor sombra, hace ya un año de tu tu ausencia y esperando te encuentres bien, solo quisiera saber si le darás seguimiento a alguna de tus obras, y realmente si te decidieras a publicarlas, con mucho gusto las compraría sin dudarlo, eres un autor prolífico y de calidad como pocos así que solicito ampliamente la continuidad de tus proyectos.

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  18. Cuando pública más por favor no nos olvides

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  19. Hace más de un año que no publicas nada ni en esta página ni en todo relatos, me gustaría saber si vas a seguir publicando y si te encuentras bien, pues me resulta muy raro esta falta de publicaciones tuyas

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  20. Buenas noches hace poco me recomendaron leer tus historias e inicie desde el principio, he leido algunas historias y me han gustado, he comenzado con las mas cortas, pero hay una que me ha dejado con el sabor que el final quedo inconcluso

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  21. PERO PUEDE SER IDEAS MIAS, ME REFIERO A LA SERIE ELOY Y MARISA. ME HUBIESE ENCANTADO UN CAPITULO MAS, ALGUNAS COSAS CERRARON MUY RAPIDO, ES DECIR CASI 11 CAPITULO DE LOS 13 DONDE SE REFLEJA QUE AUN CON LA INFEDILIDAD HABIA AMOR PARA TERMINAR SEPARADOS, COMO QUE NO ENTIENDO ENTONCES PORQUE LA SERIE LLEVA EL NOMBRE DE LOS DOS SI TERMINAN HASTA EN MALOS TERMINOS

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  22. DUDAS COMO POR EJEMPLO SI LA LAPIDA DE LA RELACION FUE QUE EL TENIA CONFIANZA TOTAL EN ELLA Y ESO DESTRUYO TODO, PORQUE ELLA NO LE PREGUNTO NUNCA COMO SE DIO CUENTA DE LA TRAICION, PORQUE LAS HERMANAS DE MARISA NOTARON QUE HABIA ALGO RARO PERO LA MADRE QUE ERA CERCANA A ELOY NO LO NOTO. AL FINAL SE DA A ENTENDER QUE ELOY SE CASA CON CRISTINA POR EL NACIMIENTO DEL HIJO DE AMBOS Y PARA DARLE EL APELLIDO A LA NIÑA Y ELLA TIENE MIEDO DE DECIRLE QUE EL ES EL PADRE DE ESA NIÑA, QUE ES PRODUCTO DE UNA INSIMINACION DE LA QUE EL NO ESTA ENTERADO. SABE QUE CON ESO LO PERDERIA. ADEMAS MARISA SE CASO DE NUEVO PERO EN SU CORAZON ELOY ESTA PRESENTE. ADEMAS QUE LA SERIE TERMINA CON LA SIGUIENTE¨: Y pese a todo lo ocurrido, la vida continuó su curso para todos ellos…

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  23. LOS PUNTOS SUSPENSIVOS NO SON UN FINAL, ES UNA CONTINUACION, SE QUE DEBES ESTAR OCUPADO, QUE TIENES MUCHOS PROYECTOS, OJALA Y TU SILENCIO DE MAS DE UN AÑO SEA POR ESO Y NO POR SALUD. PERO PARECE EXTRAÑO PERO DE LAS 5 SERIES QUE HE LEIDO DE TU AUTORIA ESTA ME DEJA CON LA IMPRESION QUE FALTABA MAS EN LA HISTORIA DE ELOY Y MARISA

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  24. por favor te agradeceria mucho saber algo mas, he tratado de leer otra pero no me sale de la cabeza que a la historia de Eloy y Marisa le falta un final, hasta no se la muerte de alguno de los dos preferiria, jajajaj eso por decir algo, no soy escritor y estoy iniciando a leer mucho, pero es que todavia hasta el final los dos seguian asegurando que para Marisa Eloy era el hombre de su vida desde que lo vio y para Eloy aunque ella dejo de ser el faro y pilar de su vida, seguía amándola

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  25. he pasado dias esperando y realmete espero que señor shadow este bien, sera mucha insistencia y posiblemente este muy ocupado con muchos proyectos, pero si no se lo pido estare años con el pesar de que a lo mejor usted talvez me hubiese complacido y haria un epilogo de la serie Eloy y Marisa

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  26. Es usted mi autor favorito. Le escribo desde una pequeña cuidad en Argentina para agradecerle el haber compartido tanto talento y tanto trabajo de forma gratuita. Sepa usted que sus obras valen oro puro y me han acompañado a casa, al trabajo y hasta de vacaciones. Le deseo exitos en su vida y otra vez: muchas gracias!

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  27. Hola, he leido todo lo que has escrito y es mas hasta he descubierto a otros autores estupendos entre tus relatos favoritos, ojala y pronto nos des una agradable sorpresa y podamos disfrutar de tus relatos. La serie Eloy y Marissa merece un epilogo, en muchas de las otras series lo hiciste y seria bueno que en esta tambien lo hagas, aunque claro esta es la opinion de un novato e ignorante. Saludos

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  28. Sr. Shadow, sabemos que anda ocupado pero quisiéramos saber si se encuentra bien y si piensa volver a escribir, gracias

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  29. Pues ando así, así. Tengo ahora algo de tiempo, me pondré a terminar el siguiente capitulo de Lilim para TR y luego entrare de lleno en el próximo de confederación Imperial, que lo tengo a medias.

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    1. Genial!!!
      La verdad es que se echan de menos tus relatos y los que nos hemos quedado a medias con Lilim y con Confederación Imperial estamos deseosos de leerte. Ánimo

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  30. Estoy feliz pude leer a shadow otra vez, gracias por volver con nosotros

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  31. Un saludo MAESTRO, se t extrañaba muchisimo.
    Tu legion sigue, devorando tus relatos.
    Un saludo de AngelKaido de TD

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    1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    2. TR. mis dedazos siguen pulsando la tecla incorrecta.

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  32. Querido autor, quizás este comentario se pierda entre los demás, quizás ni siquiera lo leas, solo quería comentarte que de pequeña, una adolescente, te encontré en todorelatos, conocí las crónicas del mejor y único nigromante, Vhalzord y desde aquel día te he amado, amo lo que escribes y las historias que tejes con tu imaginación. Gracias por haberme hecho tan feliz durante mi adolescencia, cuando esperaba con ansias que subieras un capítulo. Eres un magnífico escritor. Muchas gracias.

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