viernes, 18 de febrero de 2022

                             Confederación Imperial Galáctica


Libro - 17

Karasasn


5










Fecha estelar - 5344

10º Cuadrante Militar del Imperio

Sistema Kurilc

Sala de Reuniones

Nave de Combate "Represor"

 

El Almirante Tagard asistía impávido a una reunión con la Almirante Tanya, el General Mao, su Alteza y por supuesto, tras este de pie, su sombra, Selena. Entre Tanya y Selena le estaban poniendo al día de los sucesos ocurridos y que de tan mal humor habían puesto a ambas, mientras lanzaban miradas furibundas sobre su Alteza, el cual mostraba su habitual aspecto de no haber roto un plato en su vida. El General Mao por su parte, que parecía una estatua, había optado por no involucrarse en lo que fuese que pasase durante el periodo de misión del Grupo… Todo el proceso que se vivió, el General lo "sufrió" en la pequeña sección de inteligencia que el Represor llevaba a bordo, y pese a no haber sido capaz de discernir por completo en el expediente que le paso su Alteza a la vez que a Tanya de la que preparaba, había visto algunos indicios y algo se barruntaba sobre el motivo real de querer estar por la zona, aunque desde luego no a esa escala... Pero eso al menos le sirvió para tomarlo con un poco más de perspectiva, y sobre todo, no cruzarse por delante de nadie hasta que las cosas se calmasen un poco.


Según parece, el grupo del Represor tardo poco en comenzar a tener trabajo, nada más ocupar su posición, recibieron el aviso de que un par de cargueros se habían "perdido". Fueron rápidamente interceptados y puestos bajo custodia de un Destructor para ser escoltados al muelle de una base militar para que esperasen. A la semana, fue un grupo de tres naves que se pusieron un poco quisquillosas con el grupo de vigilancia que las intercepto, la entrada en escena del grupo del Represor termino con el problema casi al instante. Es de suponer, que el hecho de que las ordenes directamente se las diese una Almirante, desde la nave insignia del Príncipe Heredero, y con la presencia de un oficial del SISI de uniforme tras de ella con cara de pocos amigos, ayudó considerablemente a que todo el mundo resultase ser bastante razonable.

Fue poco después cuando comenzó la desagradable cadena de sorpresas que de tan mal humor tenia a la Almirante Tanya y a Selena. El Príncipe Jhored, le entregó a Tanya un completo informe sobre las Colmenas que era prácticamente idéntico al del Almirante Tagard. La única diferencia entre ambos, fue la inclusión en el de Tagard de un Anexo que fue el que provocó que prácticamente todos los presentes en su primera reunión pensasen que aquello tenía que haberlo pergeñado alguna especie de lunático. En realidad, todos los datos de ese mismo anexo, estaban en el informe, solo que divididos entre más de una veintena de apartados diferentes.

El anexo indicaba básicamente, que, en las presentes circunstancias, los lideres de las Colmenas tenían un protocolo que con alguien ajeno a ellos terminaba en un enfrentamiento armado sí, o sí. Los lideres Karasans saludaban amablemente a sus homólogos y a los forasteros, disparándose entre sus naves capitanas, concretamente, primero dispararía el "visitante" y después el "anfitrión". Esto implicaba, que, si como su Alteza esperaba que sucediese, un grupo de Karasans a cuyo mando estuviese una de sus reinas se topaba con el grupo de Tagard o el del Represor en terreno de la Confederación Imperial, tanto el Represor como el Colossus, amablemente, deberían de dejar que le disparasen a modo de saludo… Las naves capitanas avanzarían una hacia otra dejando atrás al resto, para poco después, comenzar sus rondas de disparos de saludo. No hace falta decir, que eso precisamente era algo con lo que su Alteza Imperial, contaba con que sucediese y que obviamente, "se olvidó" de decírselo a Tanya y a Selena.

El motivo por el que Jhored quería estar precisamente allí, era por el más que probable encuentro con alguna de las Reinas Karasans. En la presente situación, Jhored no esperaba sacar mucho de ello, pero en cambio, si se podría llegar a perder bastante de lo ya conseguido o incluso frustrar sus planes, por eso quería ser él personalmente quien llevase todo el peso de "la conversación". Según el informe que el mismo había confeccionado, se estimaban en 67 el número total de Colmenas. Se conocían perfectamente a las 3 Colmenas vecinas, se tenía también un buen conocimiento de 11 más, y tan solo parcialmente de otras 8. Eso planteaba un problema, y es que había un total de 45 Colmenas, dos tercios del total, de las que no se sabía absolutamente nada. No obstante, de lo encontrado entremezclado en lo más profundo de los diferentes informes de inteligencia sobre esta ocasión especial, más las conversaciones con las tres reinas cuando solicitaron la protección de su Alteza para sus "Corbetas de Exploración", fue capaz de discernir ciertos elementos comunes entre las reinas que pensó que podían servirle para salir airoso de la prueba o al menos, ayudar a mantener la actual buena relación con las Colmenas en general.

Cuando sucedió el encuentro con la Reina Karasasn y Jhored explicó el procedimiento a seguir, tuvo que ponerse muy, pero que muy serio tanto con Tanya como con Selena para que obedeciesen, incluso amenazo con arrestarlas si no se "comportaban". Obviamente, ambas le juraron a su Alteza, que esto no quedaría allí y que iba a tener que darles a ambas muchas explicaciones…, ante lo que Jhored, evito cuidadosamente cualquier sonrisita al pensar lo ingenuas que podían llegar a ser las dos algunas veces… Los disparos entre las naves capitanas se realizaban con los cañones secundaros, obviamente a potencia estrictamente regulada, y dentro de un cierto patrón de disparo que debía de replicarse, para luego del mismo modo, ir frenando hasta detenerse, pero esto también había que realizarlo exactamente a la misma velocidad. La "ceremonia" de saludo resultaba ser muy precisa en todos sus aspectos, potencia de los disparos, patrón de los mismos, sincronización entre ellos, lugares donde hacían blanco... era algo que solo de pensarlo daba dolor de cabeza…

Pero en realidad, el mayor problema que tenía Jhored entre manos, no era ese cumulo de "exactitudes" a realizar, pese a resultar ser bastante complicado de por sí, sino evitar que la escolta del Represor, o lo que es lo mismo, el resto de la Flota, replicase a los disparos que la nave capitana Karasasn realizaría sobre este. Mientras Jhored se ocupaba de organizar la respuesta con los oficiales de Sensores, Armamento e ingeniería, una enfurecidisima Tanya se las veía con los alterados mandos del resto de los mandos de la Flota al enterarse de lo que iba a acontecer, con el fin de que nadie moviese ni un solo musculo sin una orden expresa suya. De Selena por su parte, casi que mejor ni hablamos del cabreo y que por su expresión, parecía tener la perentoria necesidad de matar a alguien… Y seguro que nadie adivinaría a quien tenía en mente…

 Obviamente, no hubo tanta suerte como para que la Reina que se presentó fuese de una de las Colmenas de las que se tenía algún conocimiento. No obstante, pese a la reorganización sufrida en las Colmenas por la situación presente, hubo ciertos detalles que no fueron "eliminados" como eran los emblemas de estatus en las naves Capital de sus Reinas, y que marcaba tanto la Colmena a la que pertenecía como su posicionamiento en relación a las demás. Si bien como supondréis la parte de "pertenencia" no significo nada para Jhored ya que no conocía dicha colmena, la otra sí que significo un dato relevante, concretamente, que la Colmena de la Reina presente ocupaba, o había ocupado hasta el momento, un puesto entre el 4º y 6º entre los Karasasn, lo que la convertía en una Reina con mayúsculas. Su forma de actuar ante ella, junto con el conocimiento de cómo comportarse correctamente en el saludo inicial al encuentro, le dio a Jhored un importante activo a la hora de "conversar" con la Reina cuando por fin, tras el saludo ritual de disparos, se abrieron las comunicaciones. Era obviamente una reina muy poderosa entre los suyos, por lo que Jhored era muy consciente de que debía de andarse con muchísimo tacto durante lo que durasen las conversaciones, que con las Reinas Karasasn solían ser tan largas y espinosas, como enrevesadas.

Durante algo más de tres horas, la Reina y Jhored estuvieron dando vueltas y más vueltas sobre si mismos, adulándose entre ellos con una marcada condescendencia mutua sin aparentemente para nadie, llegar a ningún lado visible. Durante todo este tiempo, de la Nave capitana de las Colmenas no paraban de salir y entrar comunicaciones que según el oficial encargado de los sensores, estimaba que procedían de lo más profundo del territorio Karasasn. Jhored durante todo el tiempo permaneció en pie, con las manos a la espalda y una sonrisa, parado ante la figura de algo más de dos metros y medio de altura de la Reina Karasasn emitida por el proyector holográfico. Durante estas tres horas, en el puente de mando del Represor, el único que parecía estar completamente relajado, tranquilo y despreocupado, era su Alteza Imperial, porque todo el resto estaba de los nervios, sin poder evitar mirar de reojo la imagen de la Reina Karasasn. Cuando por fin los Karasasn se retiraron, sin que por cierto nadie entendiese en el puente de mando nada de lo que había ocurrió o de lo que habían estado hablando pese a estar presentes, su Alteza sorprendió a todos con sus nuevas órdenes, dichas además en un tono, aparentemente, de lo más alegre y despreocupado...

Si bien la Frontera seguiría cerrada, Jhored dio órdenes personalmente al Alto Mando para que nuevamente reinstaurase las patrullas tal y como se hacían antes de este suceso. Igualmente ordeno el despliegue de una segunda línea de refuerzo para las patrullas compuesta esta vez sí, con naves pesadas, Cruceros de Batalla, Acorazados y Superacorazados. Después pasó a transmitir al Alto Mando un código cifrado con ordenes específicas para que se iniciase el refuerzo del 10º Distrito Militar con el despliegue de una parte de la Flota estacionada en los 1º y 4º Distritos Militares, los dos internos de la Confederación.

Por lo que parecía, y nadie en el puente entendía en qué momento fue, cuando entre su Alteza, la Reina Karasasn y quien fuese a quien esta estuvo consultando durante esas tres horas, habían llegado a una especie de compromiso para la custodia de la Frontera. Después de eso le dio órdenes a Tanya para reunirse con Tagard, y tras unir ambos grupos dirigirse a toda velocidad hacia el Décimo Cuadrante cerca de la Frontera Shilrrurs. Concretamente debían de dirigirse al sistema Kurilch, cerca de la Principal Base de la Flota del Cuadrante, situada en el sistema Larnia. Cuando por fin Tanya lo tuvo todo organizado y fue a pedirle explicaciones a su Alteza sobre todo lo acontecido, se encontró con la desagradable sorpresa de ser informada por una hipercabreada Selena que este, casualmente, había decidido en ese preciso momento, que "necesitaba" una sesión de Gravedad, por lo que se introdujo en su cámara especial, lejos del alcance de las dos… Y si, ambas eran conscientes de que su Alteza algunas veces solía usar como excusa la Cámara de Gravedad para "escurrir el bulto" cuando no quería dar explicaciones.

Al dirigirse hacia el grupo de Tagard, el Represor también captó el informe que se envió a este sobre el Arcturano… Digamos que entre que la Almirante Tanya estaba algo enfadadilla por todo lo sucedido y que el hecho de que su Alteza hubiese escurrido el bulto en sus propios morros, más el que a Selena aparte de todo esto, también se le sumaban además ciertos sucesos acaecidos en Arcturus que aún le hacían subirse por las paredes cuando los recordaba, no es que ninguna de ambas entrase en el sistema con buena "perspectiva" de ser amable… En gran parte, fue esta frustración acumulada el motivo de que nada más entrar al sistema en donde en esos instantes se encontraba Tagard resolviendo su pequeño problema, hizo que Tanya diese la orden de usar la artillería principal del Represor para volar la zona de motores de cualquier nave que no estuviese detenida o en proceso de ello. Selena por su parte, no desaprovechó tampoco la ocasión de poder causarles algunos problemas adicionales al gobierno de Arcturus en la cabeza del impresentable del propietario del convoy.

Cuando por fin Tanya termino de explicar todo lo ocurrido, le paso el turno a su Alteza… Indicando también con tono francamente sarcástico y mirando hacia Jhored, que, por su parte, como era habitual ya, no tenía ni la menor idea de que se suponía que hacían allí…

-        Bueno, en realidad hacemos poca cosa, nos vamos a estar moviendo cerca de la Frontera con los Shilrrurs para esperar que se nos una el Destructor "Virote" -replico Jhored, sonriendo beatíficamente a Tanya-.

-        Alteza… usted no se va a acercar a esa frontera, se ponga como se ponga… y muchísimo menos en la actual situación -replicó Selena, quien conocía de sobra el aumento de la tensión por el despliegue de la Flota-.

-        Oh, bueno, cuando digo frontera me refiero ir al sistema estelar Argdoria… -sonrió-.

-        Ese sistema está en tercera línea, además, es un sector muy tranquilo y deshabitado, salvo por pequeñas explotaciones mineras… -replico el General Mao quien estaba revisando los datos-.

-        ¿Y que se supone que vamos a hacer allí?... y Alteza, no quiero nuevas sorpresas o lo pongo bajo arresto y ordeno irnos rumbo a Capital en el acto… -replicó Tanya muy seria mascando las palabras-.

-        No, tranquila, solo vamos a esperar a que se nos una el Destructor "Virote", luego saltaremos al primer Distrito Militar, y una vez allí nos separaremos, cada uno de nuestros refuerzos regresara a su base de origen, nosotros a Capital, y el Almirante Tagard a Mar-Shagan...

-        No lo entiendo… ¿qué importancia tiene ese Destructor…? -pregunto Selena con curiosidad-.

-        Presupongo que ese "Destructor" estará comandado por el Almirante Stratos, ¿o me equivoco? -replicó Tagard-.

-        No, no se equivoca Almirante… una vez se nos una, la UEP Estrella Oscura continuara bajo la cobertura de esa identidad hasta llegar a Mar-Shagan…

-        Vamos, traduciendo, que todos los problemas que han surgido en la Frontera entre las Colmenas Karasasn y los Shilrrurs tienen detrás la mano del Almirante… -dijo Tanya-.

-         Solo en parte… solo en parte… en realidad, el Almirante únicamente ha creado problemas en dos sistemas estelares concretos en el momento más "conveniente"… -Jhored hizo aparecer un mapa holográfico de cierta parte de la Frontera Shilrrus con los Karasasn en donde aparecían dos puntos señalados-.

-        No entiendo… -dijo Tanya-.

-        Son dos sistemas Karasasn, como creo que todos saben, a estos, el que sus vecinos "usen" para pasar o comerciar los sistemas deshabitados adyacentes a la frontera les preocupa poco. En este caso, la cuestión era conseguir que les preocupase, y mucho…

-        Pero esos sistemas son insignificantes… no tienen el menor valor para nadie… ahí no existe nada útil… -dijo Tagard-.

-        A corto plazo si, a medio plazo perder su paso por ellos les creara muchísimos problemas a los Shilrrurs… -sonrió ladinamente Jhored-.

En realidad, esos dos sistemas no tenían el menor valor para ninguno de ambos más allá de servir como un simple colchón, aunque técnicamente eran parte de los territorios de las Colmenas. Pero los Shilrrurs habían cometido el estúpido error de situar en uno de ellos una pequeña base orbital con algunos sensores en una órbita baja de uno de sus planetas debido en especial a parte del peculiar tráfico que transitaba por allí. El problema a medio plazo es que adyacente a esos dos sistemas se encontraba el Sector Novara, en donde los Shilrrurs tenían varias de sus principales fábricas de armas, y concretamente, allí estaban todas las que suministraban de Torpedos a su Flota. ¿El problema con ello?, la necesidad de estas fábricas de cierto elemento altamente volátil y muy sensible a la frecuencia de ciertas radiaciones. Actualmente, en el mismo sector Novara los Shilrrurs tenían algunas minas que usaban para suministrar este elemento indispensable.

Jhored hacía ya un par de años que detecto en los informes de inteligencia, que comenzaban a aparecer ciertos datos que hablaban de que esas minas estaban comenzando a dar síntomas de agotamiento, pero en aquellos instantes era una información que no le servía de nada, aunque se la guardó por si más adelante pudiese sacarle partido. En realidad, eso no suponía un problema en sí, pues los Shilrrurs también tenían minas de ese elemento en el sistema Krfturos, en el sector adyacente. Pero, la ruta directa entre el sistema Krfturos y esas industrias pasaban necesariamente por esos dos sistemas Karasasn. Debido precisamente a la particularidad de toda esa zona, varias de cuyas estrelles emitían radiación en una frecuencia peligrosa para la estabilidad de dicho elemento, para llegar a su destino exclusivamente por territorio Shilrrurs, los cargueros deberían de dar un rodeo más que considerable.

El elemento en cuestión tras su extracción debía de ser refinado para obtenerlo lo más puro posible, y era en esa situación cuando la radiación se convertía en un serio problema. Por si alguien se lo pregunta, la cantidad de elemento extraído en relación con el desecho, era tan ínfima, que el trasladarlo sin refinar no era una opción realista. Además, el refinado del material tenía fecha de caducidad para ser útil, por lo que tampoco podía estar en ese estado de modo indefinido. En esos instantes, la actual situación en las Colmenas, ya había provocado pequeños encontronazos en todo ese sector, pero esto aumento drásticamente a causa de varios ataques sufridos por cargueros Shilrrurs a manos de naves de ataque Karasasn precisamente en esos dos sistemas. Concretamente tres cargueros Shilrrurs, uno de ellos militar con dicho elemento en sus bodegas, habían sido torpedeados por una nave ligera de la Flota Karasasn.

Pero el remate que termino de complicar del todo la situación fue la voladura por parte de los Karasasn de la pequeña base Shilrrurs con todos sus efectivos dentro, donde nadie se salvó. Según la transmisión recibida de la base, esta había sido atacada por una nave de ligera Karasasn que les tomó por sorpresa destruyendo sus defensas y, según supusieron los refuerzos al llegar, poco después también debieron de acabar con sus medios de transmisión, dejándola incomunicada. Cuando las primeras naves de auxilio Shilrrurs llegaron, de la pequeña estación orbital únicamente quedaban escombros y no había supervivientes que pudiesen contar nada. Eso sí, todos los rastros en la zona, apuntaban directamente al uso de Torpedos de origen Karasasn… Y un dato muy importante a tener en cuenta, es que en contra lo que solían y suelen hacer otros pueblos, los Karasasn no negociaban con sus armas, por lo que, para los Shilrrurs, el origen estaba claro…

Las patrullas Shilrrurs de la zona habían respondido atacando a patrullas Karasasn, incrementándose poco a poco la escalada. Normalmente, la Colmenas actuaban de forma independiente, por lo que realmente cualquiera de las fronterizas con los Shilrrurs no les suponía peligro alguno a estos, en embargo, en esta ocasión se encontraron con que todas ellas actuaban al unísono, y eso sí que era un auténtico problema. Con sus habituales divisiones, y siempre que no fuesen atacadas a gran escala, sería difícil provocar una respuesta conjunta. Pero en esta ocasión, esta se produjo al instante, y si había un enemigo que nadie quería era precisamente las Colmenas como un bloque. El problema de los Shilrrurs, es que realmente esa "base" estaba dentro de territorio Karasasn, lo que a nivel diplomático no tenía justificación posible y si continuaban escalando más los enfrentamientos podrían verse finalmente involucrados en una guerra total con los Karasasn.

Y el repentino incremento de unidades de la Flota de la Confederación Imperial en sus fronteras, aunque previsible por la situación, no es que les ayudase tampoco mucho, especialmente desde que sus servicios de inteligencia en Capital, habían conseguido "averiguar" que el alto mando de la Confederación tenía "pruebas circunstanciales" de su connivencia con Razors y Corix en su contra… Pero lo que de verdad preocupo seriamente al Alto Mando de los Shilrrurs, fue el hecho de detectar en la zona de la Frontera, aunque en un sector interior del Distrito Militar fronterizo, de la presencia del "Represor", nave insignia del heredero de la Confederación Imperial, acompañado de una flota de escolta lo bastante potente como para poder "operar" por su cuenta, cosa que les ponía bastante nerviosos. Si el Alto Mando de la Confederación Imperial tenía conocimiento, por circunstancial que fuese, de sus operaciones en contra de la Confederación Imperial, resultaba obvio que su Alteza también. Y el problema que tenían los Shilrrurs, es que bajo su punto de vista y al contrario que el Alto Mando de la Confederación, el Príncipe Jhored sí que era tan imprevisible, como especialmente peligroso…

Jhored, con sus "filtraciones" programadas, acababa de colocar a los Shilrrurs en una situación muy complicada. De por si eran ya una raza un tanto paranoica, con los datos del conocimiento sobre sus operaciones contra la Confederación Imperial apoyando a Razors y Corix, la presencia de su Alteza cerca de su Frontera acompañado de una Flota de potencia respetable, precisamente cuando más alta estaba la escalada con los Karasasn, no es que les augurase nada bueno. El modo de pensar Shilrrurs era muy simple, para ellos su Alteza resultaba del todo imprevisible, y con el nada era descartable. Especialmente temían el que ya anteriormente en dos ocasiones, su Alteza había conseguido movilizar a la totalidad de la Flota de la Confederación Imperial en los morros de los servicios de inteligencia de todos sus vecinos, actuado con ella, combatido, aplastado a sus enemigos en un cortísimo periodo de tiempo, y nadie se enteró de nada hasta que todas las naves regresaron a sus bases… Por otro lado, también estaba el detalle de que por los datos que manejaba el Alto Mando Shilrrurs, la única frontera de las Colmenas Karasasn que se mantenía absolutamente tranquila, era precisamente la de la Confederación Imperial, y si tenían que apuntar hacia un culpable de ello, nuevamente el Príncipe Jhored se llevaría casi todos los votos…

Pocos días después, el nivel de la escalada con las Colemenas fue decreciendo paulatinamente a medida que los Shilrrurs comenzaron a retirar fuerzas de la Frontera, moviéndolas hacia la de la Confederación Imperial. Poco a poco Jhored fue dando órdenes de retirar los refuerzos llegados el 1º y 4º cuadrantes de la Frontera Shilrrurs, desatascando la situación una vez constató que le daño pretendido por las acciones de la UEP Estrella Oscura ya estaba hecho. Los Karasasn, una vez calmada la situación, fueron muy explícitos con los Shilrrurs, cualquier nave de estos que atravesase la frontera seria destruida nada más ser detectada, negándoles de ese modo los dos sistemas tan vitales para sus intereses.

Jhored sabía que posiblemente, los Shilrrurs aun no fuesen plenamente conscientes del problema que se estaba fraguando contra ellos a medio plazo. Cuando las minas del Sector Novara se agotasen, o su producción no fuese lo suficiente como para alimentar a las industrias armamentísticas, se les iba a presentar un bonito problema. O aceptaban el incremento de distancia con sus correspondientes costes en todos los aspectos, logístico, económico, protección, etc, o movían sus industrias a otros sectores, algo cuyo coste podría ser astronómico. En cualquier caso, durante un periodo de tiempo relativamente amplio, decidiesen lo que decidiesen, sus Flotas iban a tener algunos problemas de suministros, especialmente con los Torpedos. Y Jhored también tenía claro que las relaciones de los Shilrrurs con sus vecinos siempre solían ser algo complicadas, por no decir, que tensas y tirantes, algo que se podría aprovechar a su debido tiempo para seguir "agradeciéndoles" sus indeseadas alianzas…

El Almirante Stratos tuvo una misión bastante más sencilla de lo que inicialmente se esperaba. Su Alteza le había marcado y dejando muy delimitado tanto el territorio como los blancos que podía atacar. Obviamente, cualquier ataque debía de ser realizado con los Torpedos Karasasn que fueron suministrado, el principal problema es que únicamente disponía de catorce efectivos, ya que finalmente, otros ocho tuvieron que ser descartados, por lo que debía de maximizar todo lo posible su rendimiento. El único blanco cerrado que su Alteza le había dejado, era la destrucción de una base de sensores y comunicaciones Shilrrurs en uno de los dos sistemas Karasasn a los que debían de circunscribirse para provocar problemas. Allí debían de hacer dos cosas, primero robar los códigos de transmisión sin que los Shilrrurs se enterasen de ello, y segunda, destruirlo de modo que todo apuntase hacia los Karasasn.

El causar problemas no fue complicado, tres cargueros aislados torpedeados con la identidad de una nave de Guerra Ligera Karasasn hizo su función. La mezcla de unidades de las diferentes Colmenas por la presente situación dio aún más verosimilitud a los ataques, ya que se fue muy cuidadoso con que ninguno de los emblemas o marcadores sobre la "simulación" de nave Karasasn se correspondiese con alguna de las dos vecinas de los Shilrrurs. La base resulto también más simple de asaltar de lo que pudieron suponer en un comienzo, todo gracias a su situación. La base vigilaba territorio Karasans, pero eso gracias a que debía pasar lo más desapercibida posible y a la situación de los astros en el sistema, se había formado un punto ciego a los sensores, lugar desde donde la UEP podría acercarse con escaso riesgo de ser descubierta hasta no estar prácticamente encima de ellos. De los siete Torpedos Karasasn que aún les restaban, usaron tres, dos para cargarse ambos montajes defensivos, y el otro para destruir las antenas de comunicaciones.

Una vez hecho esto, los comandos de Sigrid asaltaron la entrada a la pequeña base, abriendo paso a los Marines de Asalto quienes eliminaron a todos sus ocupantes y recuperaron toda la información posible que se hallaba en los ordenadores, incluyendo los códigos de comunicaciones. Usando estos, la Estrella Oscura envió un mensaje de auxilio notificando el ataque a la base por parte de fuerzas Karasasn, luego utilizo los cuatro torpedos restantes junto con cargas puestas por los Marines para destruir completamente la Base. Una vez terminó, procedió a usar su sistema de cobertura para desaparecer de la vista de cualquier refuerzo que pudiese acudir y retirarse hacia el territorio de la Confederación, hacia el punto de encuentro con su Alteza. Cuando por fin la UEP Estrella Oscura llego al sistema en donde le estaba esperando el Represor, presentaba la "imagen" del Destructor de la Flota "Virote", el cual se incorporó al Grupo de Combate del Almirante Tagard.

 

EPILOGO

 

La tensión entre las Colmenas y lo Shilrrurs iba a durar varias décadas. Los Karasasn solían planear a muy largo plazo en todos sus aspectos. Esto tenía sus ventajas, y sus inconvenientes. Una vez habían sido obligadas a precipitarse en sus decisiones, en este caso al aumento de fuerzas de su Flota en la Frontera Shilrrurs y la "reocupación" militar de sus sistemas fronterizos, el luego normalizar la situación, lo hacían a su propio "ritmo", es decir, excesivamente lento para cualquier otra raza. Los dos sistemas en cuestión fueron ocupados por patrullas Karasasn, y estas no iban a ser retiradas o su espacio nuevamente abierto como mínimo a medio plazo. Pero esto en versión Karasasn, significaba décadas. Para cuando los Shilrrurs se diesen cuenta de la necesidad de uso de ambos sistemas, estos estarían fuera de su alcance salvo que quisiesen involucrarse en una guerra. El golpe económico sería importante, y durante un periodo de tiempo su flota sufriría de ciertos desabastecimientos críticos.

El efecto de las maniobras de su Alteza sobre la Frontera de las Colmenas con la Confederación no se vería de inicio, tardaría unos pocos meses aun una vez reabiertas en comenzar a detectarse los primeros cambios. Empezando por un sutil incremento del comercio. Las tres colmenas por otro lado, incrementaron su posición más allá incluso de lo esperado por el Príncipe Jhored, con lo que sus "gastos militares" se fueron poco a poco incrementando casi a la misma velocidad que fue haciéndolo "su" comercio con la Confederación Imperial. Sin embargo, algo que no previó su Alteza y que genero una tensión no deseada entre las colmenas, salió de la reunión que tuvo con la Reina en la Frontera.

Por lo que se enteraría tiempo después, la Colmena de dicha reina alcanzó la segunda posición entre ellas, y finalmente, tras mantener vigiladas a las tres fronterizas, termino por exigirles el libre uso para ella de "sus" vías comerciales con la Confederación. En otras circunstancias, la actitud de cualquier colmena habría sido "enfrentar" independientemente las exigencias, lo que podía llevar bastante tiempo para los estándares humanos, sin embargo, en este caso la reacción fue instantánea y por parte de las tres Colmenas fronterizas en un sólido bloque conjunto. Una a una eran batibles para cualquiera de las ranqueadas entre los cuatro primeros puestos, pero las tres unidas, no. Tardarían lo normal entre ellas, ósea, unos años, en llegar las cuatro a una serie de acuerdos que les beneficiarían, y que a más largo plazo forjaría entre ellas una sólida alianza… Por otra parte, para la Confederación todo esto le creo una Frontera "segura" con las Colmenas.

Por si alguien se lo pregunta, el Sr. Gomor Karoc tuvo serios problemas en su mundo cuando fue entregado a su gobierno por agentes del SISI. Para cualquiera en el planeta Arcturus, el comercio era como su dios, y si bien el que el Sr. Gomor estuviese a punto de frustrar el creciente comercio con las Colmenas fue algo bastante negativo en su contra, el que hiciese que la atención de su Alteza se fijase sobre sus "negocios" fue aun muchísimo peor.

Básicamente, el Sr. Gomor se las apaño para engañar al gran Maestre de Comercio de Arcturus, el cual, apoyado por el Gobierno Arcturano, se "quejó" arguyendo que su conciudadano únicamente había estado siguiendo la legislación comercial y que estaba siendo discriminado únicamente por su injusta fama y la de su propio pueblo. El pobre no fue consciente hasta que fue demasiado tarde de que todo esto lo hizo directamente presentándolo ante la persona de su Alteza Imperial. Tanto el Gran Maestre, como el Gobierno de Arcturus en pleno perdieron por completo el color y sudaron de miedo todo lo que nunca habían hecho en su vida, cuando su Alteza tuvo a bien responderles.

El Príncipe Jhored, tuvo a bien informar al Gran Maestre de Comercio y al gobierno Arcturano, que se sentía profundamente conmovido por las quejas presentadas, y que, como su responsabilidad, no podía permitir que uno de los pueblos de la Confederación fuese discriminado de modo injusto, por lo que había decidido estudiarse detenidamente toda la legislación comercial para ayudar que esta se aplicase de modo correcto a todas y cada una de las naves de comercio de su pueblo. Los Arcturanos eran expertos en usar todos y cada uno de los "agujeros" o espacios en blanco que tenía la legislación comercial en su beneficio, lo que les había generado negocios "legales" muy rentables a la vez que creado una fama tan peculiar. Si algo no quería ningún Arcturano vivo, muerto o por nacer, era ver que su Alteza Imperial en persona se disponía a "solucionar sus problemas" con la legislación comercial…

Obviamente, tanto el Gran Maestre como el Gobierno dieron marcha atrás tan rápido que se podría decir que se tropezaban entre ellos con las disculpas. Ni que decir tiene, que, para esto, lo ideal es que alguien "cargase" con todas las culpas, reales o ficticias que hiciesen falta, y el que más a mano, y mejor situado estaba para ello, era el Sr. Gomo Karuc, que no conforme con atraer sobre Arcturus la atención de su Alteza en persona, también había atraído la del SISI. Si para Arcturus existían dos posibles cosas nefastas que les podrían ocurrir, el Sr. Gomor había traído a su puerta ambas a la vez… La vida del Sr. Gomor como poderoso comerciante Arcturano tuvo un brusco fin en cuanto la "justicia" Arcturana le puso las manitas encima, la condena no le llevo a la cárcel, pero si que le dejo en la más absoluta ruina.

 

 

FIN


16 comentarios:

  1. Bueno, otra vez gracias. Ahora a mordernos las uñas hasta que llegue el Libro 18, en fin paciencia.

    ResponderEliminar
  2. Amigos, lamento comunicarles que este es el ultimo libro de Confederacion Imperial Galactica.
    De buena tinta hemos sabido que Shadow fue internado en el Instituto de Neurología, debido a un cortocircuito en las neuronas del occipital.
    Los medicos detectaron elevadísimas temperaturas en esa zona del cráneo, por lo que recomiendan que no vuelva a escribir sobre el tema.
    Los medicos comentaban que el paciente balbuceaba algo sobre un mago y unos zoarghs o algo asi que habian sido vistos abordando la Estrella Oscura luego de salir del Represor con una cajita de elemento Z o algo asi entendieron.
    Es lamentable este suceso, y esperamos su recuperacion.
    Se maneja que el ultimo libro de CIG fue el que provoco el cortocircuito

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que susto al principio LPM... Más cuidado con los fieles de corazón frágil

      Eliminar
  3. Excelente, MAESTRO SHADOW. La manada le sigue aclamando.
    AngelKaido

    ResponderEliminar
  4. GRACIAS Shadow por este nuevo relato.
    Confiaba que hubiera más tiros, queda claro que me había creado ciertas expectativas con "la matanza del cerdo" y ha resultado que, en ese sentido, solo había unas cortezas.
    En todo caso, vemos que Jhored sigue en su salsa, manipulado, haciendo sin que le vean, etc.
    Ya dirás que planes tienes, aquí o en TR, siempre es un placer leerte.

    Un saludo,
    VGG

    ResponderEliminar
  5. Como si esto asi, voy tener conseguirme brazos de repuesto.
    Dentro de poco tiempo empeza por las uñas y seguire y seguire y llegare a los codos
    El unico que puede evitarlo eres tu
    Publicando un nuevo libro.
    "A colado??"

    ResponderEliminar
  6. Hola Shadow! Cómo te encuentras de la mano? Gracias por acordarte de nosotros.

    ResponderEliminar
  7. No news, good news.
    Seguro que Shadow esta trabajando para satisfacer nuestra "gula" lectora. Un buen día, de una tacada, aparecerán 4 libros seguidos y nos iremos todos "patas abajo" de semejante despliegue creativo por su parte.
    Shadow dudo mucho que hagas lo que he dicho, pero estaría bien saber de ti.

    Un saludo,
    VGG

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estoy en ello, tanto en CIG como en Lilim... paciencia...

      Eliminar
  8. mil gracias por avisar... ¿cómo sigues del brazo? ¿ya mejor?

    ResponderEliminar
  9. Shadow sabemos que el proceso creativo no puede apurarse (y tienes que buscarte los frijoles en tu trabajo) aunque todos deseamos saber de Jhored, Ashur, Vhaalzord, Mina, Amaratha y toda la cohorte de tus personajes.
    Pero lo mas importante es saber como estás, que resultados tuvo la rehabilitación. Si necesitas un brazo positronico podemos hablar con Daneel Olivaw que a veces está por aquí. Saludos

    ResponderEliminar
  10. Ummmm, he sentido una gran perturbación en la Fuerza (estoy con la Obi-Wan Kenobimania).
    He entrado corriendo a ver si Shadow había subido un nuevo libr, y veo que han vuelto a tocar el archivo del blog 🤣🤣🤣. Todas las entradas salen de nuevo como “Sin título”, en vez de "Confederación Imperial Galáctica, Libro XX, Titulo del libro, etc”.
    Maestro Shadow, sal del reverso tenebroso y manifestaste 🤣🤣🤣.

    Un saludo,
    VGG

    ResponderEliminar